La diferencia entre vivir en Benicàssim y Betxí es de más de 1.300 euros el metro cuadrado. Son, respectivamente, el municipio en el que el precio de la vivienda está más caro y más barato en Castellón, al menos entre los analizados por Idealista en su último informe sobre el mercado inmobiliario provincial, que data del pasado mes de agosto.
El informe refleja importantes variaciones en cuanto al precio medio del metro cuadrado, la principal medida de valor utilizada como referencia en el mercado. A Benicàssim, donde está valorado en 1.854 euros, le siguen como localidades con importes más elevados Alcossebre (1.684), Peñíscola (1.571) y Orpesa (1.335). El elemento común entre todas ellas es que se tratan de destinos turísticos, lo que encarece los inmuebles. En la capital de la provincia el metro cuadrado se paga de media a 1.187 euros.
En el lado opuesto está Betxí, donde esta unidad de superficie está valorada solo en 520 euros. Le sigue San Joan de Moró (599) y Altura (642). Entre las poblaciones de más tamaño de la provincia las más baratas son Onda y l'Alcora, en las que está valorado de media en 668 euros.
Todo ello hace que el precio medio del metro cuadrado en la provincia se sitúe en la actualidad en 1.104 euros. Según la gráfica de la evolución de este parámetro ofrecida por Idealista, desde que aproximadamente en el 2013 se relajara la caída en los precios provocada por la crisis económica, la tendencia apunta hacia la estabilidad en los últimos años, sin grandes subidas ni caídas. Lejos queda el boom inmobiliario, que elevó el precio medio en julio del 2007 a 1.896 euros.
Tendencia
La pandemia ha agudizado si cabe la compraventa de viviendas al contado en Castellón, sin necesidad de préstamo bancario. Lo ratifican los datos de mercado del mes de julio hechos públicos por el Colegio de Registradores de la Comunitat Valenciana.
En un contexto en el que la venta de casas y pisos ha crecido el 113,9% en el séptimo mes de este año en relación con julio del 2020 (922 frente a 431), las hipotecas han caído el 58,6% y se han limitado a 451, de manera que los pagos han sido en efectivo en el 51% de los casos.
