Ya queda poco para el conocido como veranillo de San Miguel. Esta corta 'estación' del año es popular por ser el último coletazo del verano, se caracteriza por acumular algunos días de altas temperaturas, dignas de los meses más intensos del verano. Se da siempre en torno de la festividad de San Miguel, celebrada el 29 de septiembre, y obviamente de ahí viene su nombre.

La verdad es que este periodo de altas temperaturas no tiene ninguna explicación científica, es decir, puede ocurrir o puede que no ocurra, depende del año. De hecho, hay veces que ocurre semanas antes o semanas después.

¿Podrá Castellón disfrutar de su veranillo este año?

Pues bien, lo cierto es que pese a que en las últimas semanas las precipitaciones y las tormentas han sido las protagonistas en la provincia. Parece que en Castellón sí se cumplirá la tradición, y se podrá disfrutar de un último fin de semana de verano.

Se trata del próximo fin de semana, el de los días 25 y 26 de septiembre, ya que se esperan jornadas soleadas con temperaturas que lleguen con facilidad a los 30 grados.

Margen de error

No obstante, hay que recordar que la meteorología es una ciencia predictiva que no suele equivocarse pero que no es exacta al 100 %, y menos en estas fechas, cuando la variabilidad atmosférica es muy característica de las zonas de clima mediterráneo, en los que las tormentas torrenciales aparecen de forma rápida y localizada. Por tanto esta primera previsión, optimista, del veranillo de San Miguel, hay que cogerla aún con pinzas por si durante la próxima semana el radar meteorológico sufre cambios drásticos.