Reciplasa, a través de su consejo de administración celebrado en el Menador Espai Cultural de Castelló, dio luz verde a su nuevo presupuesto para el próximo ejercicio del 2022 dotado con 17,2 millones de euros, de los que 8,5 irán destinados a inversiones con el objetivo de mejorar su planta de tratamiento de Onda.

La empresa pública que gestiona los residuos urbanos de la zona centro de la provincia de Castellón dedicará gran parte de la consignación a impulsar los túneles de fermentación de la materia orgánica. El presidente de la entidad, Ignasi Garcia, detalla que el objetivo para por «mejorar nuestra planta para conseguir que los residuos que generan nuestros pueblos y ciudades, en lugar de acabar soterrados en un vertedero durante años y años, puedan ser revalorizados y vuelvan a ser productivos en una economía circular que es la mejor manera de tener un planeta sostenible».

Garcia indica que las inversiones que inició Reciplasa, como la instalación de separadores balísticos y ópticos, seguirán ejecutándose el próximo año y serán «muy importantes» para modernizar la gestión de los residuos y adaptarla a las más exigentes normativas europeas. «Estamos haciendo un esfuerzo para optimizar al máximo los recursos económicos y ecológicos de los que disponemos y la idea de la empresa pública es continuar trabajando en esa dirección», declara el presidente del ente, quien recuerda que su proyecto de gestión «contempla hasta 40 millones de euros en importantes mejoras que se van a ir ejecutando en los próximos años».

Cánones

El consejo de administración de Reciplasa también abordó los cánones que obtiene desde los ayuntamientos en concepto de la gestión de residuos de cada uno de los municipios.

Sobre esta cuestión, el órgano colegiado de la empresa acordó mantener la subida del 3% en el canon de tratamiento que se acordó hace ocho años. El principal fin de esta decisión pasa por destinar esta cuantía a sufragar las inversiones anteriormente explicadas.

Mientras, para el resto de cánones está prevista solo la aplicación de la variación correspondiente al índice de precios al consumo (IPC) en comparación con lo abonado durante el actual ejercicio.