Castellón contará en un plazo aproximado de un mes con una nueva unidad en la Ciudad de la Justicia de la capital. Se trata de una oficina de asistencia social, que se ubicará en el decanato de los juzgados y que asesorará a las personas en procedimientos de ámbito social como, por ejemplo, los desahucios. Así lo confirmó ayer la consellera Gabriela Bravo en conversaciones con Mediterráneo, tras asistir a la toma de posesión del nuevo presidente de la CES-CV, Arturo León, en Castelló.
«La nueva unidad es una demanda de los jueces, que se dieron cuenta de que al juzgado que estaba de guardia en Castellón llegaban habitualmente casos con un contenido muy social y que requerían de un asesoramiento previo para los afectados», explicó la máxima responsable de Justicia.
La oficina la compondrán dos trabajadores sociales y un funcionario, que atenderán a las personas que acudan a los juzgados de la capital con problemas que no sean estrictamente jurídicos y que requieran de indicaciones para realizar reclamaciones u otros trámites. «Una de las áreas que más demandas de asesoramiento y apoyo concentra es la de los lanzamientos de viviendas, aunque la unidad llevará otro tipo de asuntos sociales más amplios», indicó Bravo al término del acto.
Tres oficinas de la víctima
Cabe recordar que en la Ciudad de la Justicia de Castellón ya existe una oficina de atención a víctimas del delito, que presta una asistencia integral y especializada que comprende atención jurídica, psicológica y social durante todo el procedimiento e incluso con posterioridad a su terminación.
El mismo departamento también se encuentra en la sede judicial de Vila-real y en Vinaròs.
El 80% de los casos que abordan estas oficinas de atención a víctimas del delito de la provincia acude por casos de violencia de género. Las maltratadas reciben asesoramiento acerca de cómo actuar en el proceso judicial, apoyo psicológico y acompañamiento.
Estas unidades atienden al año a más de 3.000 castellonenses, según datos de la Conselleria que dirige Gabriela Bravo. Los delitos más habituales son los de lesiones y coacciones relacionados con la violencia sobre la mujer.
En la Comunitat hay un total de 20 sedes de esta índole.
