El tercer trimestre de este año fue propicio para el mercado inmobiliario de Castellón. Los datos del Colegio de Registradores indican que entre los meses de julio a septiembre se formalizaron 3.086 compraventas, lo que supone un incremento del 42,5% respecto al trimestre anterior. Un crecimiento muy superior al 19,9% de Alicante y el 10,4% de Valencia.
Hay que remontarse al primer trimestre del 2008 para encontrar una cifra superior, cuando se registraron 3.816 compraventas. La delegada en Castellón del Colegio de Registradores, Inmaculada García Fabra, señala que esta tendencia «ha sido constante a lo largo de todo este año». Lo ratifican los números de los primeros nueve meses del 2021, con un acumulado de 9.436 viviendas vendidas, una subida del 40,2% respecto al mismo periodo del año pasado.
Son varios los factores que explican este fenómeno. Por un lado sigue el rebote tras los peores momentos de la pandemia, aunque García Fabra también destaca más puntos de vista. «Las propiedades que están en manos de los bancos han tenido una buena salida, con especial atención a unifamiliares y adosados, ya que sigue la dinámica iniciada tras el confinamiento, en la que muchos compradores prefieren vivir en espacios más amplios y que, a ser posible, tengan algo de jardín; además, los precios son asequibles en función de la zona», detalla. En el conjunto de la Comunitat Valenciana, una de cada cinco ventas se ha hecho en unifamiliares.
Efecto del coronavirus
Otra de las explicaciones también tiene que ver con las consecuencias del coronavirus, ya que el incremento de la mortalidad ha conllevado un mayor número de ventas procedentes de herencias.
En cuanto a la proporción entre viviendas nuevas y usadas, la mayoría siguen siendo de segunda mano, pero se reducen las distancias. De enero a septiembre las de primera ocupación crecen un 22,8%, con 1.381, mientras que las usadas moderan el crecimiento hasta el 5.2% con 1.020.
Estabilización y precios
En cuanto al futuro, los primeros indicios marcan a que puede haber un enfriamiento a la vista. «El comportamiento de la gente en las últimas semanas es más prudente, debido al precio de la energía, que también apunta a que acabará repercutiendo en todo tipo de productos básicos», indica la delegada de los registradores de Castellón. Por el momento, añade que es pronto para saber si esta tendencia se mantendrá en la primera mitad del 2022.
La estadística registral revela que se ha dado un incremento de los precios en el conjunto de la provincia. Según las viviendas registradas a lo largo del año, el precio medio por metro cuadrado se sitúa en 1.077 euros, lo que supone una subida del 9% sobre el mismo tramo del 2020. «Hablamos de un incremento medio, pero las principales revalorizaciones se han dado sobre todo en las zonas de más demanda de Castelló y en ciudades con precios más elevados como Benicàssim», comenta Inmaculada García Fabra, mientras que en el resto de localidades las subidas son más limitadas.
Los datos ahora conocidos confirman la evolución al alza del sector de la construcción. En los primeros nueve meses del 2021 se registraron 924 visados de obra nueva, muchos más que los 702 de todo el 2020. Para el final de este año se calcula que se superará la marca de 1.108 visados del año 2011. Al igual que en el ritmo de compraventas, la incertidumbre por el coste de la vida y el incremento de los precios de suministros y materias primas marcará el fin de año y el arranque para el 2022.
Castelló es la tercera capital de provincia con el precio más bajo
El informe dado a conocer por los registradores muestra que Castelló es de las capitales de provincia con el precio medio más bajo de entre las viviendas registradas en los tres primeros trimestres del año. Concretamente, es la tercera más barata, con 1.062 euros por metro cuadrado. Solo Ciudad Real, con 1.029, y Zamora, con 1.013, están por debajo. Pese a ello, la revalorización en el último año es notable, con un 11,3%, lo que supone una de las subidas más altas de toda España.
Sobre la proporción de viviendas vendidas en la capital sobre el conjunto de la provincia, Castelló concentra el 21,68% de las transacciones totales. Por otro lado, Castellón se mantiene como una de las zonas con mayor porcentaje de compras de extranjeros, con el 10,24%.
