El Periódico Mediterráneo

El Periódico Mediterráneo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

MAZÓN PROPONE "SUMAR" CON EL PARTIDO NARANJA

Ciudadanos rechaza en Castellón un pacto preelectoral con el PPCV

Cargos del partido ven la opción fuera de lugar y creen que haría difíciles acuerdos locales

Imagen de archivo de la reunión del comité provincial de Ciudadanos en Castellón con cargos autonómicos y estatales.

A Ciudadanos (Cs) no le gusta en la provincia de Castellón la idea de un pacto preelectoral como el que podría plantearse en la reunión que el líder del PPCV, Carlos Mazón, tiene prevista este jueves con la coordinadora general de Cs, Inés Arrimadas, para que ambas formaciones acudan a los comicios autonómicos de forma conjunta. El objetivo estaría en evitar que se pierdan los votos emitidos a favor de la formación naranja, que se halla en horas bajas y para la que las encuestas prevén menos del 5% de los sufragios, de modo que se quedarían fuera del Parlament de ir en solitario.

De hecho, según la encuesta anual del Nou d’Octubre realizada por Invest Group para los diarios de Prensa Ibérica en la Comunitat Valenciana: Mediterráneo, Levante-EMV e Información de Alicante, el partido de Arrimadas no alcanzaría el mínimo de apoyos necesario para obtener representación parlamentaria.

Al menos es lo que se desprende de la opinión de diversos cargos provinciales consultados, que estiman que el horizonte de las urnas está aún lejos --la previsión es 2023 si no hay adelantos--, así como entienden que una alianza con los populares podría perjudicar a los resultados de Cs en el ámbito local, donde mantienen ahora acuerdos de Gobierno con el PSPV en puntos como Almassora, Castellnovo u Orpesa.

«No es la línea que llevamos»

Precisamente, la alcaldesa de esta última localidad, quien forma parte del comité de dirección provincial de Ciudadanos, Araceli de Moya, apuntó este miércoles que en el ámbito del partido «no se ha hablado» de un hipotético pacto con los populares. Afirmó que, en todo caso, «no es la línea que llevamos en los grupos de trabajo internas».

«Me resulta extraño, entre otras razones por los muchos casos de corrupción que tiene el PP sobre la mesa», dijo De Moya, para concluir: «No es mi competencia».

Otras voces aseguraron que no ven utilidad en lo que se está planteando. De hecho, entienden en la formación naranja podría llegar a tener un papel bisagra no solo en determinados municipios como Benicàssim, donde sí gobiernan ahora con el PP, además de los mencionados, sino también en la Diputación, ya que el bloque de izquierdas formado por PSPV y Compromís arrebató a los populares el gobierno de la institución por un puñado de votos. De lograr reeditar sus dos escaños provinciales, podría depender de Ciudadanos el color del ejecutivo.

Marta Barrachina y Mazón

Del lado del PPCS, la presidenta provincial, Marta Barrachina, apuntó que «no se sabe de qué van a hablar» Mazón y Arrimadas, para asegurar que un eventual pacto «llegará si tiene que llegar y lo decidirá quien tenga que hacerlo», para concluir que lo que quiere y en lo que está centrado su trabajo es en que «la gente vote al PP».

Por su parte, Carlos Mazón aseguró que para lograr un cambio político en esta autonomía «lo más importante» es sumar «todos». Aludió así a la reunión que mantendrá con Arrimadas y la posibilidad de consensuar una lista electoral autonómica conjunta entre ambas formaciones.

Precisó que «no hay una lista planteada porque no hay unas elecciones planteadas», pero destacó la necesidad de «trabajar en la suma» para propiciar el «cambio» y habló de un «camino de brazos abiertos» ya iniciado.

Compartir el artículo

stats