El parque Ribalta de Castelló ha acogido este jueves por la mañana la lectura pública de la declaración del Dia Internacional de la Eliminació de la Violència contra la Dona, confeccionado con la colaboración de los colectivos cívicos y feministas, que han mostrado su preocupación ante el aumento de los asesinatos de mujeres a manos de sus parejas y exparejas y ante la escalada de la violencia vicaria y ante el desamparo que sufren los huérfanos. En la lectura, se ha apelado a derrocar los muros que aún hoy invisibilizar esta lacra y la consideran un hecho privado y doméstico y socializarla como un conflicto político, social, cultural y simbólico. Señalan además que la lucha por una vida libre de violencias debe ser diaria.

En el manifiesto se señala la necesidad de que las entidades locales estén al lado y junto a las víctimas, dando apoyo a la legítima reivindicación del derecho de las mujeres a no sufrir ningún tipo de violencia y abordando desde un enfoque multidisciplinar, la planificación de las políticas locales, el acompañamiento a las víctimas, y el desarrollo de medidas de sensibilización y prevención dirigidas al conjunto de la ciudadanía.

Planes de igualdad

También se han pedido planes de igualdad de oportunidades, redoblar esfuerzos en la detección de la violencia de género, el diseño de políticas integrales para superar esta lacra social.

Violencia obstétrica y digital

Apela a considerar la violencia machista un problema político de primer orden, de salud pública y un grave atentado a los derechos humanos fundamentales. Entre otras cuestiones, se manifiestan contra las nuevas formas de violencia, como la violencia obstétrica, la vulneración de los derechos sexuales y reproductivos, la violencia digital, la violencia en la vida política y en la esfera pública.

Independencia económica

También muestran su preocupación por las altas tasas de empleo temporal en mujeres que, unido a la destrucción y caída del empleo, advierte de un peligroso aumento de la brecha de género. Por ello, piden proyectos y programas locales que garanticen la igualdad de género en el empleo y el apoyo al espíritu empresarial para garantizar su independencia económica.

Cultura de la no violencia

También apoyan la feminización de la sociedad, vinculada a los valores tradicionalmente otorgados a las mujeres, como la cultura de la no violencia, el diálogo, la gestión de emociones y la horizontalidad.

También reclaman seguir avanzando en el desarrollo del Pacto de Estado y pacto valenciano contra la violencia de género.