Los ayuntamientos de la Comunitat Valenciana dispondrán de dos años más, hasta el 31 de diciembre del 2023, para transformar las plazas interinas de policía local en fijas, ya que con el normativa actual solo podían hacerlo antes de finales de 2021. Se trata de una enmienda del PP transaccionada con los socios de la Generalitat (PSPV-Compromís-Unides Podem) para su inclusión en la ley de acompañamiento a los presupuestos de 2022, una propuesta aprobada ayer en comisión en Les Corts.

En el 2019, el Consell dio dos años a los consistorios para que convocaran oposiciones destinadas a incorporar a los policías locales interinos, un proceso que se ha complicado por la pandemia y que hace necesaria la ampliación.

En concreto, los nombramientos de policías locales interinos tendrán una caducidad máxima de cuatro años --a contar desde el 2019 cuando se acordó esta transformación-- sin posibilidad de prórroga. Pasado este plazo se producirá el cese automático, según establece la enmienda consensuada.

Por otro lado, los socios del Botànic no llegaron a un acuerdo en relación con la enmienda de Unides Podem a la Ley de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje (LOTUP) de rebajar a un año la moratoria actual que da un plazo de tres años para regularizar las actividades implantadas en suelo no urbanizable.