La Diputación de Castellón busca arrancar al Gobierno central una financiación de 206 millones de euros para sufragar las inversiones necesarias para desarrollar la red de interés general de abastecimiento de agua potable y garantizar así el suministro hídrico al 90% de la provincia.
El proyecto, enmarcado en el Plan Director del Agua (PDA), vio este jueves la luz públicamente en manos del presidente de la corporación provincial, José Martí; el diputado de Sostenibilidad, Ignasi Garcia: y la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà. Todo después de que el pleno de la Diputación mostrara su apoyo por unanimidad al documento.
Tal y como calificó Garcia, el proyecto constituye «la arteria de la infraestructura hídrica» de la provincia. A nivel técnico, se trata de una red --en rojo en el gráfico-- con una alta capacidad de transporte y de flujo bidireccional, permitiendo de esta forma el reparto de agua hacia todo el territorio castellonense. Además, integra infraestructuras ya declaradas de interés general por el Estado: los sondeos de Acuamed en Canet lo Roig y Alcalà de Xivert que ahora están sin uso o las infrautilizadas desaladoras de Moncofa y Cabanes-Orpesa, así como el sondeo de emergencia realizado por la Confederación Hidrográfica del Ebro en Forcall, entre otras.
De futuro
Una «arteria» que, en un futuro, se verá complementada por otra red de interés provincial --azul en el mapa-- y una secundaria --color verde--, asegurando así la conexión con cada uno de los municipios de Castellón. Y es que, la medida nace con consenso, ya que como aclaró el presidente José Martí trascenderá a varias corporaciones y mandatos, pues se extenderá incluso décadas dada su elevada complejidad. «Estos son los pasos que empezamos a dar de un proyecto de futuro para garantizar el suministro de agua de la provincia», manifestó el diputado de Sostenibilidad.
«Se trata de un proyecto muy ambicioso en el que deben implicarse la Generalitat y el Gobierno de España, y en el que aspiramos a contar con la ayuda de los fondos europeos de reconstrucción», defendió el dirigente provincial, quien recordó que el principal objetivo es «garantizar el suministro de agua para todos y para siempre en toda la provincia, tanto para uso doméstico como industrial, en la costa y en el interior, incluso en un contexto marcado por la emergencia climática».
Mientras, la consellera Mireia Mollà adquirió el compromiso desde el Consell de financiar el coste de la redacción del proyecto, quedando su ejecución en manos del Gobierno central. Con tal de recibir esa financiación, los próximos pasos a realizar pasan por buscar la declaración de interés general por parte del ejecutivo, por lo que el proyecto será aportado antes del 22 de diciembre para que sea considerado a incluir dentro del próximo ciclo de planificación que se extenderá hasta el 2027, aludiendo también a las confederaciones hidrográficas. La dirigente autonómica felicitó también a la Diputación y sus técnicos «por implicarse de una manera tan clara al garantizar los bienes y servicios del bienestar del conjunto de los vecinos y vecinas».
En marcha
Garcia defendió que, pese al carácter a largo plazo de la iniciativa, ya se han realizado pasos como los 33 pozos nuevos, entre los recuperados y los infrautilizados, o incrementar la utilización de las desaladoras que dispone la provincia, con una ampliación mayor ya prevista.
