Diez años de prisión es la pena que solicita el Ministerio Fiscal para un joven acusado de abusar sexualmente de una menor de 15 años durante las fiestas de la Magdalena del año 2019 en Castelló. La víctima declaró ayer viernes, tras un parabán, y recordó que se encontraba ebria, desorientada e intimidada cuando sucedieron los hechos. «Él me dijo que lo acompañara al baño de un bar, me ofreció cocaína y me violó», dijo la adolescente muy afectada. 

La denunciante reconoció que no recordaba todo lo que sucedió la noche de los hechos. «Bebimos un licor de hierbas, fumamos porros y probé la cocaína, droga que no había consumido antes», comenzó a explicar la afectada. «Nos dimos unos besos y él intentó meterme la mano por dentro de los pantalones y yo le decía que no. Me quitó las bragas y yo no tenía fuerzas para resistirme», contó.

La víctima insistió en que iba «en muy malas condiciones» y que tras los presuntos abusos sexuales en los servicios de un bar se quedó «tirada, sin dinero ni batería en el teléfono». «Vagué por las calles sin rumbo hasta que me encontré a mi prima. Me puse a llorar y le conté que había tenido un problema con un chico», relató.

Por su parte, el procesado solo contestó a las preguntas de su abogado defensor. Alegó que en esos momentos tenía «graves problemas con la cocaína» y que conoció a la menor en la carpa alemana. Sin embargo, mantuvo que la chica le dijo que tenía 19 años en lugar de 15 --un extremo que ella negó rotundamente--. «Fue ella la que me siguió al baño y me decía que yo le gustaba mucho. Yo había consumido un gramo de cocaína y no era capaz de mantener relaciones sexuales en esas condiciones, así que no pasó nada», declaró el procesado en el juicio.

Los testigos

La madre de la víctima fue llamada a declarar como testigo y afirmó que los hechos causaron «un antes y un después» en la vida de su hija. «Ella dejó los estudios, dejó de ver a sus amigos y lo hemos pasado bastante mal. Se cerró y no quería hablar del tema», relató la progenitora a preguntas de la representante de la Fiscalía.

La amiga que la noche de los hechos estaba con la víctima dijo que cuando ellas se separaron la afectada iba «bien», pero que cuando se reencontraron después de los hechos estaba «bastante borracha». «Lloraba y decía que la habían violado», recordó en el juicio.

El caso quedó ayer visto para sentencia en la Audiencia.