La presidenta provincial del Partido Popular de Castellón (PPCS), Marta Barrachina, ha reclamado este domingo "respeto" para el trabajo de los ganaderos de la provincia tras las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón, al que ha tildado de persona 'non grata' para Castellón.

Por este motivo, el PPCS promoverá mociones en todos los ayuntamientos para pedir la dimisión del ministro, al tiempo que ha criticado la "tardanza y la tibieza" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "a la hora de reprenderle, una vez más, con la boca pequeña".

Barrachina ha considerado que los ganaderos han sido "atacados" por un ministro al que el cargo "le queda muy grande" y "tolerado por el Gobierno de Pedro Sánchez, que prima el mantenimiento de sus pactos políticos por encima de la defensa de los intereses de un sector que es estratégico y que combate la despoblación con trabajo y esfuerzo cada día, y muy pocos apoyos" por parte del Ejecutivo.

En este sentido, ha reivindicado que los ganaderos "merecen respeto, generan empleo, cumplen con las normas y producen calidad" y ha garantizado que su formación "no va a tolerar ataques infundados de un Gobierno de PSOE y Podemos que, en lugar de apoyar y ayudar al sector a afrontar sus problemas, lo único que hace es darle palos, con acusaciones infundadas de quien no pisa el campo, solo la moqueta del despacho".

Barrachina ha apuntado que en la provincia de Castellón hay un censo de 110.000 ovejas, casi 22.000 cabezas de bovino, casi 700.000 de porcino y 24.000 de caprino, a las que se suman "otras miles de unidades de aves y de conejos".

"El trabajo de estos ganaderos permite que los castellonenses llenemos nuestra despensa con carne de calidad, que cumplen con todos los criterios sanitarios y de bienestar animal. Y eso es gracias al trabajo de miles de familias, que cada mañana se levantan para alimentar y cuidar una cabaña ganadera que cumple con las normas, muy estrictas, de producción", ha aseverado la 'popular'.

En este sentido, ha criticado que el Gobierno "vive en su Arcadia feliz, imponiendo ideología, pero no resuelve los problemas de los ganaderos, que ahora mismo se enfrentan a subidas de costes brutales, como la energía o los piensos". "Gracias a ellos pudimos hacer frente a la pandemia sin que nos faltara de nada", ha resaltado.

"De las granjas viven cientos de familias, que a su vez generan puestos de trabajo y ayudan a consolidar un futuro en unos pueblos que necesitan oportunidades. El Gobierno de España y la Generalitat deberían ayudar a los emprendedores, para que se puedan seguir modernizando y mejorando sus instalaciones, día a día, como vienen haciendo desde siempre", ha afirmado.