De manera paralela a la evolución del servicio de Cercanías, el ministerio de Transportes debe trabajar en la elaboración del proyecto de nueva plataforma de vías, entre València y Castelló, con el fin de mejorar el servicio del AVE y posibilitar el paso de trenes de mercancías en alta velocidad. Ante las alegaciones presentadas por los ayuntamientos de la provincia al trazado, el president de la Generalitat, Ximo Puig, afirmó que la obra «es necesaria». «No podemos pedir una cosa y la contraria; apostamos por el corredor mediterráneo», dijo, si bien abogó porque la actuación se haga «con el menor impacto posible», mientras recordó que los consistorios «han hecho alegaciones a algunas de las variantes expuestas, pero no a todas».

Retrasos

Puig también aseguró que una parte importante de las actuales dificultades por las que pasan los usuarios de Cercanías se deben a la actuación de anteriores gobiernos del Partido Popular. «A principios de la década pasada la obra de la plataforma entre Castelló y València estaba licitada y en llegar al poder la paralizó», con su consiguiente efecto negativo sobre el despliegue del Corredor.

Por su parte, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, afirmó que se trata de una «infraestructura importante y necesaria que requiere del máximo consenso, pero se necesita un análisis técnico y posibilista de lo que se puede hacer y lo que no, para encontrar la mejor solución».

Greenpeace

La organización ecologista Greenpeace señaló que las inversiones en materia ferroviaria «siguen priorizando la larga distancia», por lo que rechaza la nueva plataforma «sobre terrenos de huerta protegida». Este colectivo ha presentado alegaciones al trazado del AVE, en las que asegura que ninguna de las seis variantes del estudio informativo «implica una mejora del servicio de Cercanías, lo que contradice los objetivos estratégicos del Ministerio que, supuestamente, apuestan por priorizar las inversiones en la movilidad cotidiana frente a la larga distancia".