El Periódico Mediterráneo

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La exigencia del sector de Blanch enquista la negociación del PSPV

Los perdedores se enrocan en el 47% de presencia en la nueva ejecutiva de Falomir

Falomir y Blanch, tras conocerse el resultado de las primarias del PSPV.

No es una cuestión fácil eso de la integración de dos bandos enfrentados. Nunca lo ha sido y el PSPV tiene larga experiencia en ello. Por eso, los socialistas castellonenses tras el resultado de las primarias del pasado 16 de enero siguen estirando la cuerda de la negociación, con el peligro que supone que se pueda romper. La intención del ganador, Samuel Falomir, es la de dar cabida en su nuevo organigrama al mayor número posible de partidarios del perdedor, Ernest Blanch, pero eso no quiere decir que se le impongan los nombres y los porcentajes.

Despejada la duda del presidente del partido, un ofrecimiento que se le ha hecho a José Martí, máximo responsable de la Diputación y que depositó su papeleta a favor de Blanch, la voluntad es que como vicesecretaria primera se sitúe una mujer del círculo de los perdedores, pero elegida por Falomir. El cargo estaba reservado para Estíbaliz Pérez como publicó este diario, pero no será así al declinar la alcaldesa de Almenara el ofrecimiento por motivos personales. A sus tareas al frente del Ayuntamiento, se unen el tema familiar y el hecho de que lleva en la ejecutiva provincial desde la época de Francesc Colomer. Demasiado tiempo en primera línea. Hay que seguir negociando. 

Lo que sí parece atado, al menos a día de hoy, es que habrá un grupo orgánico potente que lo completarían Joan Morales como secretario de Organización, el diputado nacional Germán Renau al frente de la vicesecretaría segunda; Xus Madrigal en Acción Electoral y Rocío Ibáñez a cargo de Política Municipal. 

A partir de ahí, todo está abierto, aunque el secretario general, Samuel Falomir, quiere en la medida de lo posible dejarlo todo amarrado el viernes. Pero ya se sabe que en un congreso, ahora ya sea del partido que sea, la ejecutiva y los diferentes órganos no se conforman hasta prácticamente la misma hora de la votación.

Reunión

Por lo pronto, esta tarde se vuelve a reunir el comité negociador: Joan Morales, Rocío Ibáñez y Germán Renau por parte de Falomir; y María Jiménez, Josep Gisbert y Benjamín Escriche por el de Blanch. No está previsto que de aquí salga una propuesta definitiva, más que por los nombres, por ese porcentaje del 47% a integrar que reclaman los perdedores. 

Una exigencia que no se cumplió durante el mandato de Blanch, donde no se produjo esa integración que ahora demanda pese a la escasa diferencia de 34 votos, lo que acentuó la división interna y motivó ese bando alternativo que en su día le apoyó y que ha ganado las primarias.  

Y en esta petición del 47% parece que hay algunas posturas más duras por parte del equipo del secretario general saliente, entre ellas la de María José Salvador. Otras, sin embargo, optarían por dejar de lado la confrontación y apostarían por la integración más allá de los porcentajes para sumarse al proyecto de Falomir.  

Las espadas siguen en todo lo alto y si no hay acuerdo, no se descarta una lista alternativa para los órganos provinciales de la parte de Blanch. Con todo, Falomir espera, como mínimo, el respaldo de un 70% de los 204 delegados al congreso de este sábado en el Magatzem de la Mar de Benicarló

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