Sigue la cascada de expedientes de regulación temporal de empleo para la industria cerámica de Castellón. El pasado miércoles se registraron dos nuevas solicitudes de ERTE, que afectan a una empresa de l’Alcora y otra de Llucena, con un total de 347 personas afectadas. En ambos casos, las razones esgrimidas son económicas, ante este contexto marcado por un fuerte incremento de los costes de las materias primas y la energía, agravado por el estallido de la invasión en Ucrania. La suspensión de los contratos de trabajo tendrá una duración de un año. Una vez realizado el registro ante la autoridad competente, se abrirá el periodo de consultas entre los responsables de las empresas y la parte de los trabajadores.
Desde el inicio de este año son cinco los ERTE ya aprobados, que afectan a 1.581 asalariados. Durante esta semana ya son cuatro las compañías que siguen este paso, que suman a 566 afectados más. Un goteo que, temen empresarios y sindicatos, siga durante los próximos meses.