El Periódico Mediterráneo

El Periódico Mediterráneo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Día Mundial del Sueño

Jefe de la Unidad del Sueño del General de Castelló: «problemas como una guerra y sus repercusiones afectan al sueño»

Los problemas para descansar son cada vez más frecuentes y circunstancias como la pandemia o el conflicto en Ucrania los agravan aún más

El especialista en Neurofisiología y responsable de la Unidad del Sueño del Hospital General de Castelló, J. J. Ortega. ERIK PRADAS

Este viernes se celebra el Día Mundial del Sueño. Una jornada para poner de manifiesto los problemas crecientes que se asocian al necesario descanso y consejos para tener un sueño reparador. La Unidad de Sueño del Hospital General de Castelló realiza todo el proceso de diagnóstico y tratamiento de las diferentes patologías de sueño en todas las franjas de edad: apnea, insomnio, síndrome de piernas inquietas, narcolepsia, epilepsia o parasomnias. Es una de las mejores Unidades de Sueño multidisciplinares de España, pero a pesar de ello, «no hemos conseguido por parte de la Conselleria de Sanitat el reconocimiento de la unidad como de referencia provincial (que lo es de facto), y autonómica en Narcolepsia, con una de las casuísticas más importantes de Europa», explica el especialista en Neurofisiología y responsable del servicio, Juan José Ortega.

  • ¿Dormimos bien los castellonenses a nivel general?
  • El sueño en los castellonenses es en general adecuado. Influyen en este buen descanso factores asociados al entorno de la ciudad, como el bajo nivel de ruido y luminosidad durante la noche; y otros ligados al estilo de vida, como mantener unos horarios regulares de alimentación y descanso, y no retrasar en exceso la hora de iniciar el sueño.  
  • ¿La pandemia ha hecho que las personas duerman peor?
  • Evidentemente. En pleno confinamiento existió una pérdida de las normas de higiene de sueño, con horarios irregulares, retraso de fase, incremento del número de siestas inapropiadas durante el día o mayor número de horas de sueño. Por otro lado, los trabajadores sanitarios y de otros servicios esenciales se vieron obligados a cambios de horarios, turnos de 12 o más horas, guardias de 24 horas sin poder tener libranzas. A ello hubo que sumar elevados niveles de ansiedad, estrés y depresión, que acrecentaron los problemas de sueño.

Equipo de la Unidad de Sueño del Hospital General de Castelló. ERIK PRADAS

  • Problemas como la guerra de Ucrania, ¿quitan el sueño?
  • Sí. Además hay que apuntar que a la pandemia ha seguido la guerra de Ucrania sin solución de continuidad. Problemas graves como una guerra, y sus repercusiones socio-económicas, evidentemente repercuten en el sueño. Si el nerviosismo en las personas es mayor, y la coyuntura lo provoca, el nivel de alertamiento durante el sueño hace que sea más fragmentado y superficial y se disparen los problemas de insomnio.  
  • Siempre se dice que hay que dormir unas ocho horas. ¿Es esta creencia verdad?
  • El número de horas que debemos dormir es el necesario para un rendimiento físico e intelectual normal. La media en España es de 7,2-7,3 horas (media hora menos que en el resto de Europa). Pero existen personas que duermen cinco horas y su rendimiento es óptimo, y otras necesitan 10 para encontrarse perfectamente. Pero son los casos extremos. La sociedad actual no permite dormir lo necesario en muchas ocasiones, y el sueño insuficiente es un problema habitual en las consultas de especialistas de sueño. Cada vez queda más clara la relación de este sueño insuficiente con la obesidad, con problemas metabólicos, hipersomnia con riesgo de accidentes, con mayor susceptibilidad a infecciones, etc.
  • ¿Cada vez son más las personas que recurren a medicación para conciliar el sueño. ¿Hay un cierto abuso de fármacos?
  • El consumo de hipnóticos es un grave problema. El gasto farmaceútico en benzodiazepinas, habitualmente utilizadas para el insomio y la ansiedad supone en EEUU el mayor por grupos farmacológicos. Sin embargo, el tratamiento de elección para el insomnio psicofisiológico, el más prevalente, es la Terapia Cognitivo Conductual (TCC). 
  • ¿Qué podemos hacer si no logramos tener un sueño reparador?
  • Adoptar las medidas de higiene de sueño conocidas. Oportunidad y tiempo de sueño adecuados. Horarios fijos de acostarse y levantarse. Desensibilizar al cerebro de forma progresiva las horas previas al sueño (disminuir estímulos luminosos, acústicos, mentales). Cenas ligeras, evitando grasas, alcohol y bebidas excitantes.

Compartir el artículo

stats