El sector cerámico de Castellón podrá optar a ayudas directas para paliar las pérdidas generadas por la crisis energética y el encarecimiento del precio del gas natural, aunque las medidas anunciadas en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros se quedan lejos de las peticiones formuladas desde las asociaciones empresariales relacionadas con esta industria. La principal novedad tiene que ver con una partida de 125 millones de ayudas directas, destinadas a las fábricas gasintensivas.
Un campo en el que entra de lleno el azulejo. Según el Ministerio de Industria, "se beneficiarán unas 1.600 empresas, de las cuales el 88% son pymes. Los sectores que se van a beneficiar de estas ayudas son el papel y el cartón, el vidrio y la cerámica". La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, explicó que con esta aportación se quiere dar un alivio "a aquellos sectores que se han visto más afectados por la espiral alcista" de los costes energéticos.
En cambio, no se han dado a conocer otras medidas reclamadas por la patronal de fabricantes cerámicos, Ascer, y que hacían referencia a la eliminación del impuesto de hidrocarburos, la reducción de los peajes de gas o una intervención temporal de los precios energéticos. Fuentes consultadas señalan que desde el Ejecutivo se han tomado medidas encaminadas para la disminución del precio de la electricidad, pero no así para reducir el coste del gas natural. Algo que ha explicado Teresa Ribera en la rueda de prensa en la que se han presentado las medidas: "Difícilmente podemos establecer precios del gas".
Otras medidas
Además de este anuncio de medidas directas, que deberá concretarse en el decreto aprobado, hay otras actuaciones en las que puede entrar el sector cerámico provincial, como la creación de nuevos avales para mantener la liquidez de las empresas, y mantener las líneas de crédito abiertas con motivo de la pandemia de coronavirus.
Por otro lado, se ha aprobado un aumento de 65 millones de euros para compensar los costes de emisión de CO2 para este año, y en la que entraría el azulejo y las empresas afines. Con este incremento se alcanza un total de 244 millones de euros, lo que permite alcanzar el máximo autorizado por la Comisión Europea. Este mecanismo permite a cada Estado miembro compensar los costes indirectos de las industrias de determinados sectores o subsectores a los que se considera expuestos a un riesgo significativo de fuga de carbono, debido a los costes relacionados con las emisiones de gases de efecto invernadero repercutidos en los precios de la electricidad.
