La portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, denuncia el cierre de la oficina de turismo en la estación de Renfe en plena Semana Santa y Pascua. “Una situación inexplicable y del todo incoherente cuando se espera la llegada de turistas en estas fechas. Su cierre a cal y canto, con la nota informativa de que permanecerá cerrada del 14 al 18 de abril, sin más explicación, ni ayuda al sector turístico, ni proyecta el destino de referencia que debe ser Castelló”, critica. 

“Este es el modelo turístico del gobierno de Amparo Marco, cerrado por vacaciones, el principal punto de referencia para los turistas que vienen a nuestra ciudad en tren, sin prestar servicio. Es inconcebible que sigan desaprovechando oportunidades para contribuir a la necesaria recuperación económica que tanto necesita la ciudad”, añade Begoña Carrasco.

Es por este motivo y porque, según dicen los populares, son muchos los castellonenses los que han hecho llegar su malestar por el cierre de esta oficina, teniendo que orientar a los turistas a falta de un plano de la ciudad, “por los que vamos a pedir explicaciones al equipo de gobierno mañana mismo cuando se retomen las Comisiones Informativas. Es un despropósito la dejadez de funciones del equipo de gobierno y la desastrosa gestión turística. No abren la Oficina de Turismo cuando más afluencia de viajeros se espera, nos recortan los trenes, nos reducen horarios, entre otros recortes. Ni Castellón ni los castellonenses merecen un gobierno que no vele por sus intereses, ni esté en lo que es prioritario ahora mismo, ayudar a remontar las pérdidas de dos años de pandemia”, añade.

 Carrasco lamenta que la alcaldesa Amparo Marco y su gobierno siga descuidado el turismo cuando más ayudas necesita. “Esperamos que la gestión desastrosa de la campaña del año pasado no se repita, sin bandera azul en la playa del Serradal desde hace dos años; con vertidos contaminantes que afectaron en julio y agosto a todas nuestras playas; con chiringuitos obligados a abrir un mes más tarde que el resto porque no contaban con permiso o con servicios turísticos municipales que se ofertan pero no se prestaron, como el Punto Bebé o la Oficina de Información Turística en el centro del Grau cerrada a cal y canto como lo está ahora la de la estación de Renfe”, concluye.