La Diputación de Castellón ha destinado 557.000 euros, con un aumento del 20 por ciento con respecto a la partida presupuestaria del ejercicio anterior, a la red educativa de unidades de conciliación familiar para fijar a la población en los municipios del interior de la provincia y frenar la despoblación.

Esta subvención garantizará que las familias con niños de entre cero y tres años de municipios con una población inferior a 1.500 habitantes puedan llevar a cabo su proyecto de vida a nivel personal y profesional en su lugar de residencia. Más de una veintena de centros en municipios de la provincia, especialmente en el interior, se beneficiarán de esta ayuda, ha indicado la institución provincial en un comunicado.

El presidente de la Diputación, José Martí, ha considerado que el aumento presupuestario "muestra el compromiso del actual equipo de gobierno con las familias de los municipios más pequeños de la provincia, que merecen unos servicios sólidos y dignos que les den motivos suficientes para mantener su vivencia en su localidad".

Coordinación

Asimismo, ha apuntado que esta red educativa "está coordinada con los ayuntamientos de los municipios, por lo que se podrán diversificar y ampliar los servicios para todas las personas con hijos menores de tres años".

Por su parte, la vicepresidenta y diputada de Bienestar, Patricia Puerta, ha subrayado que estas ayudas son "una solución totalmente gratuita y de calidad a la problemática familiar y laboral en la que muchas familias se ven envueltas".

Los ayuntamientos titulares de unidades de conciliación familiar podrán recibir hasta 21.000 euros para la contratación de personal. Por su parte, aquellos ayuntamientos que habiliten nuevas unidades de conciliación familiar se distribuirán la subvención otorgada entre contratación del personal, gastos corrientes y gastos de inversión.