La crisis energética se hace notar ya en el mercado laboral de la provincia de Castellón con la destrucción de empleo en el primer trimestre del año, siendo un efecto más de un mes de marzo que cerró con una inflación en un histórico 11,9%, apoyada por las consecuencias de la guerra provocada por la invasión rusa a Ucrania.
Los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) relativos al primer trimestre de este año plasman que el territorio provincial pierde ya empleo, rompiendo con la tendencia de mejora de trimestres anteriores enmarcada en la recuperación poscovid.
Al acabar marzo, Castellón ganó 1.800 parados respecto al último trimestre del 2021, alcanzando los 32.000. También perdió 1.500 personas ocupadas, quedando en 237.900. Por sectores, los que empujaron este dato negativo fueron el de la construcción, con 800 ocupados menos, y el de los servicios, con 3.600 menos, coincidiendo con el fin de las principales temporadas comerciales de Navidad y Rebajas o con meses de menor actividad en el sector turístico de la provincia.
Tasa de desempleo
Otro indicador a tener en cuenta es la tasa de paro, que establece el porcentaje de población en edad de trabajar que se encuentra en desempleo. En el primer trimestre del 2022 crece en Castellón un 0,7%, quedando en el 11,8%. Una evolución que contrasta con la de Alicante, donde cae un 3,8% hasta el 14,8%, o de Valencia, que baja un 0,4% hasta el 11,7%. Ahora bien, la tasa provincial se mantiene por debajo de la media de la Comunitat Valenciana, en el 12,8%, y de la nacional, en el 13,6%.
Si el análisis se realiza por sexos, en Castellón son los hombres los que registran un mayor aumento de la tasa de paro, un 1,2%, frente al recorte del 0,1% que registran las mujeres. Eso sí, en cifras absolutas son ellas quien continúan sufriendo una tasa mayor, del 13,3% en contraste con el 10,6 de los varones.
Con todo, aunque Castellón resulta la provincia más perjudicada por los efectos de la crisis energética, todavía existen indicadores que se mantiene en niveles favorables. Los 32.000 parados reflejados por la EPA constituyen la cifra más baja en el arranque del año desde antes de la crisis del covid-19. De hecho, los desocupados en el 2019 ascendían a un total de 39.400. También las personas ocupadas son 4.500 más que al inicio del ejercicio previo a la pandemia y hasta 12.900 más que en el 2021.
Mientras, la población activa asciende en Castellón, aunque apenas lo hace en 300 personas y un 0,1%, hasta las 269.800.
La Comunitat Valenciana mejora
A nivel autonómico, la Comunitat es la segunda donde más baja el paro en el primer trimestre del 2022, con 37.900 desempleados menos, solo por detrás de Andalucía, con 45.900 menos. El territorio valenciano también crea 39.900 empleos respecto al cuarto trimestre del 2021, mientras que en España se originan 878.000 empleos y el paro sube en 70.900 personas.
La Comunitat mejora además el dato de desempleo entre los jóvenes menores de 25 años, que cae en 5,23 puntos, pero aún así se mantiene en el 26,82%, más de 14 puntos por encima del paro de la población general, lo que muestra la alta incidencia de la falta de trabajo entre este colectivo.
