El president de la Generalitat, Ximo Puig, confía en que Argelia cumpla con sus compromisos de suministro de gas con empresas españolas tras amenazar esta semana con romperlos debido al desencuentro con el Gobierno de Pedro Sánchez a cuenta del acercamiento del Ejecutivo a las tesis de Marruecos sobre la zona del Sáhara. Así lo reveló el jefe del Consell ayer a preguntas de este periódico tras haberse evidenciado la preocupación del sector cerámico provincial por la advertencia de Argelia y es que el clúster del azulejo consume grandes cantidades de gas natural para hacer frente a su gran producción --concretamente, casi el 50% del consumo de toda la Comunitat Valenciana--.
«En este momento hay que garantizar un escenario de la máxima concordia posible y las reuniones que había mantenido yo días antes de que se anunciara esta situación de relación con Marruecos habían dejado síntomas bastante positivos», aseveró Puig tras acudir a ver la exposición de la artista Pilar Dolz en el Museu de Belles Arts de Castelló. El president insisitó en que debe primar un marco de relaciones diplomáticas «estables» y «pacíficas» y recalcó que «no se debe llegar a ningún tipo de rotura».
Asimismo, el máximo representante de la Generalitat Valenciana insistió en que es «fundamental» hacer un pacto por la energía. «La Comunitat puede ser autosuficiente a medio plazo y tenemos que trabajar rápida e intensamente por ello, acelerando todos los procesos para que sea una realidad», aseguró Puig en conversaciones con Mediterráneo.
El president puso en valor las renovables y su capacidad para generar cada vez más hidrógeno verde. Recordó que todo ello «es el futuro», aunque admitió que a corto plazo «hay que trabajar por estabilizar la situación del gas y bajar los precios actuales».
Ayudas a esmalteras y autónomos
Preguntado por la concesión de ayudas directas al sector cerámico por parte del Gobierno tras la subida de precios y la intención del Ejecutivo de dejar fuera a las esmalteras, Puig recalcó que el Gobierno de Sánchez «debe ser consciente de que no se debe dejar fuera a las estas empresas». Sin embargo, puntualizó que si finalmente así fuera, la Generalitat ayudaría con las 50 millones del plan Reactiva. «Trabajamos con dos líneas de ayuda: una dirigida a las empresas que se queden fuera y otra para autónomos, que tendrán una ayuda de 300 euros al mes para compensar», dijo.