La Diputación de Castellón movilizará a 750 efectivos cara a la campaña de lucha contra incendios de este verano, que será el de menor riesgo de los últimos años gracias a las continuas precipitaciones a lo largo de estos meses.

No obstante, según concretaron desde el Consorcio de Bomberos, «no hay que bajar la guardia», por ello el dispositivo será similar al de veranos anteriores con peores características. En concreto, alrededor de dos centenares de personas velarán en cada guardia por evitar incendios forestales. Entre ellos se incluyen los bomberos profesionales y voluntarios del organismo provincial, además de las unidades forestales aportadas por la Generalitat y los miembros de Protección Civil.

A todo ello se suman cinco medios aéreos y la labor realizada por las brigadas de mitigación, que tal y como recogió este diario, están impulsadas conjuntamente entre las administraciones provinciales y autonómicas y se encargan de limpiar zonas forestales, tanto de interior como de costa, repartidas en nueve equipos con 50 operarios.

Las previsiones para la temporada estival, por ahora, son favorables «por la mayor humedad» que ha provocado que la vegetación no tenga estrés hídrico, aunque el viento de poniente podría dar un giro drástico a este escenario.

Sensibilización

Mientras, el presidente de la Diputación, José Martí; el diputado provincial de Bomberos, Abel Ibáñez; el miembro de la Fundación Mapfre, Llorenç Climent; el responsable del Consorcio, Manolo Hernández; y el director de la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos, Gabriel Muñoz, abrieron ayer la semana de la prevención de incendios de Castellón, que se prolongará hasta el próximo domingo 15. 

Hasta entonces, se concienciará a los niños de municipios como Almassora, Nules, Morella, Peñíscola, Lucena o Benicàssim sobre cómo actuar ante un incendio y recursos para su prevención. También se realizará un acto de divulgación en el Estadio de la Cerámica y los próximos dos sábados tendrá lugar una jornada de puertas abiertas de 11 a 14 horas en los parques de bomberos profesionales y voluntarios.

Martí destacó que el objetivo pasa por «incidir en la formación para prevenir y saber como reaccionar en caso de siniestros». De hecho, los datos indican que en el 2020 se produjeron dos muertes en incendios en la provincia.