El mercado inmobiliario sigue dando señales de gran dinamismo en Castellón. Lo dicen quienes se dedican a la compraventa de viviendas y lo corroboran las estadísticas del Colegio de Registradores de la Propiedad. Entre los meses de enero y marzo se vendieron en la provincia 2.812 viviendas, lo que supone un alza del 7,5% sobre las cifras del mismo periodo del año pasado y de un 16% sobre las que se daban antes de la pandemia, en el año 2019.
Las cifras de compraventa de viviendas no dejan de crecer en la provincia (el incremento empezó notarse tras el fin del confinamiento y no ha dejado de acelerar su ritmo ) y el aumento es tan significativo que hay que remontarse al arranque del 2008 para encontrar un volumen mayor. Durante el primer trimestre de hace 14 años, justo cuando pinchó la burbuja inmobiliaria, se comercializaron en la provincia 3.816 viviendas y, a partir de ese año, las cifras fueron a la baja hasta que empezaron a remontar en 2016.
Pero, ¿por qué hay tantas familias que apuestan por comprar una vivienda? Para los expertos la clave está en una combinación de factores. Y uno de los más importantes es la existencia de una considerable bolsa de ahorro que no encuentra rentabilidad en los productos financieros y que vuelve a mirar al ladrillo. Otro es que los tipos de interés de las hipotecas aún están bajos, y las familias que tienen en proyecto comprar una casa quieren aprovechar antes de que suban el precio del dinero.
«Los resultados del primer trimestre de 2022 vienen a ratificar un claro e intenso crecimiento en cifras de ventas, con tasas positivas en 44 provincias. Y eso revela una notable confianza por parte de los demandantes», apuntan desde el Colegio de Registradores.
Los precios crecen un 6%
La demanda de vivienda es cada vez más alta y, en consecuencia, los precios también van al alza. El valor medio del metro cuadrado en la provincia en el último año es de 1.091 euros, con un incremento interanual del 6,7%. Pese al incremento, los valores de Castellón poco tienen que ver con los registrados en provincias como Madrid, Barcelona o Gipuzkoa, donde el metro cuadrado supera los 2.600 euros, llegando a los 3.257 en el caso de la provincia vasca.
De todas las operaciones de compraventa registradas en el primer trimestre de este año en la provincia, casi el 12% las protagonizaron familias extranjeras, unos valores que se mantienen más o menos estables en los últimos años, y que están muy lejos de los registrados por provincias como (40,7%) y Baleares (35,3%).
Franceses, británicos y alemanes lideran las compraventas por parte de extranjeros y las operaciones se concentran, fundamentalmente, en localidades costeras como Alcossebre, Peñíscola, Orpesa, Benicàssim o Sant Jordi.
