El centro cívico de la zona de Perpetuo Socorro de Castelló, uno de los barrios por donde pasará el nuevo acceso ferroviario del puerto, además de Lourdes, La Unión y Roquetes, fue ayer el escenario de un encuentro convocado por responsables de PortCastelló para dar a conocer sus características.
La convocatoria congregó a cerca de un centenar de vecinos, que quisieron conocer el detalle de las actuaciones a desarrollar, los plazos de la ejecución y el proceso de expropiaciones. El presidente del puerto, Rafa Simó, expresó que el actual proyecto «es el resultado de las mejoras incorporadas tras las alegaciones del periodo de información pública del año 2013», que supuso cambiar de dos a una vía, situarla por debajo del nivel de suelo, incorporar pantallas para reducir ruidos y también electrificar la instalación. «Del 2015 al 2022 se ha actualizado y mejorado la redacción», añadió. Sobre los plazos, recordó que a finales de año se quiere tener lista la licitación, «para que a principios del 2023 empiecen las obras».
«El actual proyecto es el resultado de las mejoras incorporadas tras el periodo de información pública del año 2013»
El director de PortCastelló, José María Gómez, detalló a los asistentes los diferentes tramos y recalcó sobre las posibles molestias de la vía que «en las inmediaciones de las casas próximas hay estudios de ruido hechos», aunque se pueden presentar alegaciones y aclarar dudas. «Hay de plazo hasta el 2 de junio», comentó. También recordó que hay varios tramos totalmente tapados para minimizar impactos, y que la vía no empezará a subir al nivel del suelo hasta que sobrepase «unos 600 metros la zona de Roquetes».
Enviado por parte de Adif --la empresa pública que gestiona las infraestructuras ferroviarias-- compareció Diego Rodríguez, de Omicron Ingeniería, quien destacó que el listado de propiedades afectadas «no es el definitivo, por lo que puede haber cambios» respecto a los planos de la información pública. «La lista definitiva estará una vez acabe el proceso de exposición, que dará lugar al proyecto final y a las expropiaciones».
Asistencia
La sesión, que en palabras de Simó, «no quisimos demorar más para que hubiera tiempo a presentar alegaciones», contó con la asistencia de los concejales del equipo de gobierno de Castelló Patricia Puerta, José Luis López y María Jesús Garrido; mientras que del PP acudió María España. También estuvo la concejala de Urbanismo de Almassora, Carmina Martinavarro.
«El proyecto incluye los estudios de ruido por si perjudica a los vecinos, y hay de plazo para alegar hasta el día 2 de junio»
En el apartado de preguntas, los vecinos se interesaron por saber si cerca de sus huertos pasará el tren enterrado o en superficie, si podrán regar sus plantaciones, o se quejaron porque la normativa todavía no comunica de forma individual a los afectados. También los hubo que querían conocer con más exactitud hasta dónde les puede tocar la infraestructura a sus propiedades, y se les aclaró que el importe del pago de indemnizaciones (y reclamar si se discrepa del importe ) se hará en una fase posterior. Los ponentes animaron a alegar si creen que se ven perjudicados en el proceso.
«La lista de propiedades afectadas no es definitiva porque puede haber cambios cuando acabe la exposición pública»
Fondos de la UE
El presidente de la autoridad portuaria explicó que el proyecto, con muchos años de recorrido previo, se ha acelerado «después de que el año pasado se anunciara su inclusión en los fondos europeos de recuperación». Serán 150 millones de euros para los accesos y 16 para la estación intermodal. Una de las condiciones marcadas en las inversiones de fondos de la UE es que la ejecución debe quedar lista antes de que acabe el año 2026. La documentación está disponible en la web de Adif, el área de Urbanismo de Castelló y la Subdelegación del Gobierno.
Los detalles de la primera fase
AFECCIONES: Las expropiaciones de terrenos suman un total de 412.046 metros cuadrados de superficie. La mayor parte son terrenos, aunque la documentación de Adif detalla que deberán ser demolidas 28 edificaciones, entre las que destacan naves industriales.
TRAZADO: Los accesos arrancan en el límite de los términos de Almassora y Castelló, y discurren en buena parte junto al recorrido de la autovía del puerto, la CS-22. Luego hay un desplazamiento para ir junto la vía CV-183 y llegar a la futura estación intermodal.
MEDIDAS: Esta primera fase comprende un total de 4,7 kilómetros. La siguiente parte, hasta llegar al interior de la dársena sur, recorrerá 3,3 kilómetros.
