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ECONOMÍA

El precio del pollo se dispara en el súper mientras los ganaderos de Castellón trabajan a pérdidas

El consumidor paga 3,20 euros por un kilo de carne mientras el productor recibe 0,45

Los productores de carne de pollo de Castellón aseguran que los costes les ahogan y que reciben los mismos precios de siempre. EDUARDO ABAD

Es la carne más consumida en los hogares de Castellón y su precio en los supermercado está por las nubes. El kilo de pollo supera en la mayoría de los puntos de venta los 3,20 euros, un 12% más que hace un año, cuando costaba 2,90 euros. El problema es que esa subida no llega a los ganaderos de la provincia, que siguen percibiendo por la carne el mismo dinero de siempre. Y a eso hay que añadir que los costes a los que se enfrentan se han multiplicado en tiempo récord. ¿La consecuencia? Los propietarios de las cerca de 70 explotaciones avícolas con las que cuenta la provincia denuncian que su situación es de «asfixia».

La Unió de Llauradors i Ramaders denuncia que el precio del pollo sube un 164% desde la granja a los lineales de las tiendas y supermercados. «El precio medio del pollo se sitúa en estos momentos en 1,25 euros el kilo en la granja, de ahí pasa a 2,40 en matadero, 2,65 en distribución y 3,20 en los supermercados y tiendas especializadas, aunque en algunos la cotización es todavía superior», aseguran desde la organización agraria que, no obstante, denuncia que de la primera cantidad los productores apenas perciben 0,45 euros por pollo criado.

Las diferencias entre la granja y el supermercado son abismales y los productores avícolas de Castellón aseguran que viven al límite. «La mayor parte de los ganaderos avícolas se encuentran en régimen de integración y deben hacerse cargo de una serie de gastos imprescindibles como la luz, gas o el combustible que están disparados y que en los últimos meses se han duplicado», explican desde la organización agraria. Y como ejemplo citan unos datos: la electricidad representa más del 75% de los costes variables de una explotación y el gasto del gas propano ha subido más de un 60%. 

Una situación inaguantable

Carles Peris, secretario general de la Unió, critica que el incremento de los precios de los alimentos de las últimas semanas no se traslada a los ganaderos. « Los avicultores no deberían cobrar menos de entre 0,55 y 0,60 euros por kilo de pollo criado y la realidad es que perciben 0,45 euros», asegura. «La situación es inaguantable para los granjeros que están produciendo con unos costes terribles y que, si no se plantean soluciones como ayudas directas, dentro de los sectores más afectados por la crisis, muchos de ellos van a tener que cerrar sus explotaciones», añade.

El responsable de la Unió señala que la nueva Ley de la Cadena Alimentaria falla también para la actividad avícola. «En ningún momento se cumple su premisa de que cada eslabón de la cadena agroalimentaria debe cubrir sus costes de producción. Los precios no se fijan del origen al destino como debería ser lo lógico, sino al revés», explica. Lo grave es que esta situación se repite en otros sectores como el cunícola. 

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