Dos líneas de ayudas de la Conselleria de Vivienda dotadas con 9,5 millones de euros fomentarán el acceso de los jóvenes a la compra de vivienda en municipios de menos de 10.000 habitantes con el objetivo de combatir la despoblación y la adquisición de domicilios por parte de los ayuntamientos para destinarla al parque público.

La Generalitat y la Diputación de Castellón unieron fuerzas con un acto en el que congregaron a representantes de diversos municipios de la provincia con tal de dar difusión a la iniciativa y facilitar el acceso de los jóvenes y de los consistorios a las mencionadas subvenciones autonómicas.

Sociedad fuerte y cohesionada

El vicepresidente segundo y conseller de Vivienda, Héctor Illueca, aseguró que dichas líneas «son estratégicas más allá de las políticas de vivienda, ya que contribuyen a crear una sociedad más fuerte, cohesionada, justa y sostenible», a la vez que destacó que «venimos de muchos años de desprecio a la vivienda pública y esta actitud no es fruto de la casualidad, sino de un modelo inmobiliario que ha pensado más en la vivienda como negocio que como un derecho».

Por su parte, el presidente de la Diputación, José Martí, apuntó que «a los alcaldes de pueblos pequeños nos gusta cómo suena la música, es algo que llevábamos mucho tiempo esperando porque difícilmente se puede retener a los jóvenes en el ámbito rural si estos no disponen de una vivienda digna que les ayude a emprender un proyecto de vida personal o familiar». Por esta razón, agradeció a la Generalitat la activación de estos programas que «vienen a reforzar nuestras políticas sobre reto demográfico y de lucha contra la despoblación, una batalla que no sé si finalmente terminaremos ganando, pero que merece la pena librarla, y estamos poniendo todo nuestro empeño».