El pleno de la Diputación de Castellón se posicionó a favor de la técnica de caza del parany, aunque no faltaron reproches continuos entre los diferentes partidos que integran la institución. Si ya es habitual que el equipo de gobierno de PSPV y Compromís voten por separado en cuestiones como esta, en esta ocasión también hubo votos discrepantes entre las formaciones que defienden esta modalidad. Tanto socialistas como populares se erigieron a favor del parany, pero no fueron capaces de ponerse de acuerdo. De esta forma la moción presentada por el PSPV salió adelante gracias al respaldo de Ciudadanos; mientras que la del PP quedó rechazada.

El portavoz de Compromís, Ignasi Garcia, reseñó que lo ocurrido en la Diputación es "una muestra de geometría variable", al contar los socialistas con socios puntuales para sacar adelante esta propuesta cuyo texto, por un lado, da "apoyo a la tradición del parany", al tiempo que reclama la autorización de las pruebas de la cesta malla para cazar tordos. El PP, que también defiende estos postulados, votó en contra al incluir en el redactado de la moción el concepto de País Valencià. "Pensamos que las formas son importantes", justificó el diputado popular Vicent Pallarés, quien también acusó a los socialistas de hacer "una ecología demagógica y de sillón; ustedes se posicionan con pancartas y manifiestos por el parany, pero luego en Les Corts votan en contra". Por su parte, el portavoz socialista, Santi Pérez, recordó que fue su partido el primero en presentar una moción sobre este asunto, y que el nombre de País Valencià es válido para referirse al territorio autonómico.

Por otro lado, la moción del PP solicitaba la autorización para lograr la autorización de las pruebas de campo del sistema de cesto malla, reclamando el cumplimiento a la Conselleria de Agricultura de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. El socialista Pérez respondió que la sentencia "ya está cumplida por parte de la Generalitat", aunque sí defiende que las pruebas "pueden ser válidas como método selectivo". Pallarés explicó que la misma moción fue aprobada en el 2017, y en esa ocasión sí que tuvo el respaldo de los socialistas. Transcurridos cinco años el parany sigue en el limbo.

Ciudadanos dio su respaldo a las dos mociones, y recordó el posicionamiento de la asociación Apaval para hacer posible el cesto malla como sustituto de los métodos de caza que fueron prohibidos a principios de siglo. Por su parte, Compromís indicó que el cesto malla "no es equivalente al parany ni es una tradición" en la Comunitat Valenciana, por lo que no sería justificable la autorización.

Médicos de las SAMU

Otro de los asuntos más controvertidos fue el dedicado a la asistencia sanitaria en las ambulancias SAMU de Castellón, después de que se conociera que algunas de ellas, como en Sant Mateu, Morella, Vilafranca o la Vall, han tenido que funcionar sin médicos por falta de efectivos. Ciudadanos presentó una moción para que la Generalitat garantice la obligatoriedad de la atención médica en este servicio. El punto salió adelante gracias a los votos a favor del PP y Compromís, mientras que el PSPV se abstuvo. La portavoz de Ciudadanos, Cristina Fernández, expuso que en verano "no se cubren bajas y vacaciones", justo en un momento en el que hay más residentes en puntos turísticos y localidades del interior. Desde el PSPV, Xaro Miralles, indicó que la ausencia de médicos "era una cosa excepcional", debido a que las bolsas de trabajo están agotadas. "Un problema estructural que ya pasaba con los gobiernos del PP", explicó. Desde el PP añadieron al problema de las ambulancias el cierre de consultorios auxiliares para turistas, y el retraso en la puesta en marcha del operativo estival, que según la diputada Nieves Martínez "se ha hecho tarde y mal".