La recolección de aceitunas caerá de una forma dramática en la próxima campaña, y Castellón es la zona que lo pasará peor en el conjunto de la Comunitat. La Unió de Llauradors indicó que la disminución de la próxima cosecha será del 85%, lo que prácticamente equivale a dejar el año en blanco. Una situación parecida se dará con las almendras. La organización agraria avisa de que "el descenso de producción previsto para esta campaña en la Comunitat Valenciana podría ser de aproximadamente el 70%".

La razón para este desastre radica en "una combinación de adversidades climáticas y fenómenos meteorológicos", comentan desde la Unió, para añadir que los daños "producidos por las heladas en determinadas zonas productoras en los primeros días de abril y las lluvias continuadas durante la primavera produjeron graves pérdidas a la producción de almendra, sobre todo por las elevadas humedades, de muchas zonas productoras" del territorio autonómico.

Entre las comarcas de Castellón más afectadas están la Plana Alta, el Baix Maestrat, y l’Alcalatén. Según amplían por parte de la Unió, "las lluvias generalizadas durante la primavera provocaron un deficiente cuajado del fruto y también problemas de enfermedades en otras muchas zonas que, unidas a las heladas, han conllevado un descenso relevante de la producción de almendra para esta campaña".

Medidas

En un contexto de catástrofe sectorial, y ante la baja contratación del seguro agrario que no se adapta a la realidad del cultivo, esta organización considera que hay que adoptar medidas de ayudas directas a las personas con parcelas afectadas por estas inclemencias meteorológicas para evitar la pérdida de competitividad de las explotaciones.

En esta línea, la Generalitat de Catalunya ha establecido recientemente una línea de ayudas destinadas a explotaciones agrícolas, entre otras de almendro, afectadas por las heladas de abril de este año con el fin de compensar las pérdidas no cubiertas por los seguros agrarios de estas explotaciones.

Las ayudas que la Generalitat catalana ha establecido para su sector de la almendra, y que son las que desde la Unió se solicitan a la administración agraria valenciana para no perder competitividad, varían en función de si la explotación está situada en una zona con limitación natural o no, si es convencional o ecológica o si está en secano o en regadío. Las cantidades en caso de una pérdida total de la producción van, según sea el caso, desde los 304 €/ha en el caso de cultivo convencional en secano en zona que no está calificada como de limitaciones naturales hasta los 1.736 €/ha en el caso de cultivo en regadío en ecológico y en zona con limitaciones naturales. Las ayudas deberían limitarse a las personas profesionales o en proceso de primera instalación.