La Conselleria de Sanidad ha abierto el proceso para nombrar a los gerentes de varios departamentos de salud: el de La Fe, el Arnau de Vilanova en València, el de Castelló y otros como los de Gandia, Requena y Alcoi. La conselleria vuelve a usar para ello un tipo de trámite "mixto" pese a que le ha dado problemas con anterioridad: abrir una convocatoria pública para que todo aquel que cumpla los requisitos se presente y pase por una comisión de valoración de méritos aunque el puesto sea, al final, de "libre designación": sigue siendo potestad del conseller decidir a quién pone "a dedo".
De hecho, el Tribunal Superior de Justicia de la C. Valenciana (TSJCV) anuló en 2020 el nombramiento de la exsenadora del PSC, Mónica Almiñana como gerente de La Fe a través de esta fórmula después de que otra aspirante llevara a los tribunales el proceso público. La anulación del nombramiento llegó varios meses después de que Almiñana dejara la gerencia de La Fe.
Sanidad abrió convocatoria pública y, además de la exsenadora del PSC, se presentó al puesto una psiquiatra con amplio currículum. Al no ser la elegida en el procedimiento, terminó llevando el nombramiento de Almiñana a los tribunales alegando que la exsenadora era una persona ajena a la administración y no era ni siquiera personal estatutario de la Conselleria de Sanidad, algo que sí se permite de forma excepcional.
De hecho, esta aspirante criticaba precisamente que se abriera un procedimiento al que todos los que cumplieran requisitos podían optar (presentando méritos, trayectoria y una memoria de objetivos) y que hubiera incluso una comisión de valoración pero que la potestad del nombramiento recayera en última instancia en los políticos, como siempre se había hecho en puestos de confianza.
La justicia ratificó la designación de Almiñana pero, tras un recurso, el TSJCV terminó anulándola en 2020. El tribunal tuvo en cuenta que pese a ser un puesto de libre designación, si se abría una convocatoria pública se debía motivar la selección suficientemente y, en este caso, no se había dado.
El convocar un proceso público para cubrir vacantes que son de libre designación se empezó a hacer en 2015 por iniciativa de la consellera Carmen Montón que quería dotar de "mayor transparencia" al proceso. En el resto de procedimientos no ha trascendido que hayan surgido problemas en estos años.
Los seis puestos están ocupados de forma "provisional"
El proceso para "buscar" a los máximos responsables de estos seis departamentos de salud se inicia con los seis puestos ocupados en estos momentos. Según han explicado fuentes de la Conselleria de Sanidad, Miguel Mínguez no tendría intención de hacer sus propios nombramientos y poner a gente cercana en estas áreas tras su desembarco en el Consell sino que el procedimiento que ahora se abre busca "ratificar" en sus puestos a los gerentes (y gerentas según la denominación que utiliza la propia conselleria) que ya están en sus puestos.
Quieren subsanar el que no se haya hecho el "trámite oficial" de nombramiento en estos últimos meses aunque siendo una convocatoria pública podría suceder lo que pasó en su día con Almiñana.
Y es que, la mayoría de los gerentes que van a ser "ratificados" fueron nombrados en sus puestos pocos meses antes de la pandemia. Es lo que ha pasado, por ejemplo, con Eva Salvo, la gerente del área de salud de La Fe que fue nombrada "de forma provisional" en agosto de 2019 tras la salida de Almiñana del puesto. Un mes después llegaba a su cargo Enrique Barbeito, gerente del área de Alcoi. Y lo mismo pasó con Ricardo Tosca, gerente del departamento de salud de Castelló, que fue nombrado en octubre de ese mismo año.
Otros llevaban más tiempo como Leandro Quiles en Requena o Mª Jesús Arilla, gerente del Arnau, que asumió la dirección del área de salud en septiembre de 2018. El nombramiento más reciente (y en el que no se puede aducir el problema a todos los niveles que ha causado la pandemia) es el de Rosa Andrés, gerente de Gandia desde mayo de este mismo año tras la jubilación de su antecesor Joaquín Miñana.
