Cerco a la recetas médicas en Castellón para evitar falsificaciones u otros errores en la dispensación que favorecen la desaconsejable automedicación en los pacientes. Los colegios oficiales de médicos, dentistas, podólogos y farmacéuticos de la provincia se han reunido para analizar las problemáticas detectadas por la emisión de recetas médicas que no siguen el modelo oficial establecido; y para buscar soluciones e impulsar acciones conjuntas de sensibilización sobre el formato correcto que deben tener las mismas para que la dispensación de medicamentos en la farmacia se realice con seguridad y todas las garantías para el paciente.
En el encuentro de trabajo, celebrado en la sede del Colegio Oficial de Médicos de Castellón (COMCAS), han participado la presidenta de este organismo, Eva Suárez; Salomé García, presidenta del CODECS, e Ignacio Fernández, también en representación del Colegio de Dentistas castellonense; Rosa Arnau (presidenta del ICOFCS), junto a los también integrantes del equipo del Colegio de Farmacéuticos Enrique Hueso y Paula Lavall; y María Teresa García (vicepresidenta) y Ricardo Pérez (abogado) en representación del Colegio Oficial de Podólogos de la Comunitat.
Los representantes colegiales inciden en que sólo hay dos formas válidas de prescribir medicamentos: la receta privada en formato papel y la receta electrónica privada. Por ello, tanto en esta primera reunión como en las que seguirán para abordar esta temática, los cuatro colegios quieren llegar tanto a colegiados como a población para que la receta oficial sea la única válida.
Problemas
Y es que los problemas se detectan, sobre todo, en recetas procedentes de consultas privadas, dado que la sanidad pública trabaja de forma electrónica con el programa Abucasis. Además, se trata de autorizaciones de dispensación en papel, que, en ocasiones no están bien cumplimentadas siguiendo el formato oficial establecido.
Esta reunión se produce, según ha podido saber este periódico, después de que desde la Conselleria de Sanitat se haya solicitado a los colegios profesionales colaboración para evitar problemas que se están detectando en la dispensación de medicamentos. Y es que el hecho de que se puedan falsificar o modificar recetas médicas resulta un verdadero problema de salud que puede estar asociado a una automedicación que los expertos rechazan por completo.
