Pertenecen a uno de los eslabones más débiles del mercado laboral. Quienes tienen entre 16 y 24 años sufrieron más que nadie las consecuencias de la crisis del 2008 y también fueron uno de los colectivos más afectados por la pandemia, que obligó a muchos de ellos a vivir en paro o tener un trabajo precario. La buena noticia es que ahora sí parece que las cosas están empezando a cambiar y el empleo juvenil crece con fuerza. Y lo mejor de todo es que lo hace con contratos, en la mayoría de los casos, sin una fecha de caducidad.
Las cifras son inequívocas. Durante los tres primeros trimestres de este año, la tasa de paro entre los jóvenes de 16 a 24 años ha bajado en Castellón del 27,7 al 17,7%, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). Lo llamativo es que se trata del colectivo que más ha reducido su nivel de desempleo, ya que mientras el porcentaje de paro ha aumentado entre la población general (en el conjunto de la provincia ha pasado del 11,2% al cierre del 2021 al 11,8% en septiembre de este año), en el caso de los profesionales que tienen menos edad la tendencia es justamente la contraria.
Cada vez hay menos jóvenes en situación de desempleo en la provincia (en números absolutos la cifra de parados asciende a 4.600) y, además, la cifra de profesionales de entre 16 y 24 años que tiene un empleo alcanza cifras récord. En Castellón ya son 21.400, una número que supone 8.200 más que a finales del año pasado. O lo que es lo mismo: casi un millar de jóvenes al mes han encontrado un empleo en la provincia entre enero y septiembre de este ejercicio.
Tipos de empleo
¿Y qué tipo de trabajo buscan los profesionales de Castellón de menos edad? ¿Qué perfiles reclaman las empresas? Los datos del Ministerio de Trabajo revelan que, pese a la reactivación del empleo hay muy pocos cambios y vendedor en tienda y almacén continúa siendo la categoría profesional más demandada por los jóvenes de la provincia, mientras que entre las ocupaciones más contratadas para menores de 25 años destacan la de camarero, peón de la industria manufacturera, vendedor o monitor de tiempo libre.
Se mire por donde se mire los datos son buenos y en el conjunto de la Comunitat Valenciana la tendencia es la misma. Nada menos que 46.500 personas de entre 14 y 24 años han encontrado un trabajo en el último trimestre del año, una cifra muy superior, por ejemplo, a la del colectivo integrado por quienes tienen entre 25 o 34 años y entre 35 y 44.
Difícil acceso a la vivienda
Que los jóvenes tengan ahora más fácil encontrar un empleo no significa que han acabado los problemas para acceder a una vivienda. Al contrario. Una persona de entre 16 y 29 años que alquile una vivienda en la provincia tiene que dejarse, de media, el 62,3% de su sueldo y, en caso de querer comprarla, desembolsaría para la hipoteca el 41,8% de lo que gana. Son cifras del último estudio del Consejo de la Juventud de España (CJE) que revela también que los jóvenes se emancipan con 29,5 años. «Si en 2010 un 53,3 % de jóvenes entre 18 y 34 años vivía aún con sus padres, el porcentaje sube ahora al 64,5%. Dejar la casa familiar antes de los treinta es muy complicado», explican en el CJE.
Menos ‘ninis’ por el récord de alumnos matriculados en FP
El mercado laboral sonríe por fin al colectivo de entre 16 y 24 años y la tasa de jóvenes de la Comunitat que no estudia ni trabaja, los conocidos ‘ninis’, se encuentra en mínimos. Por primera vez desde 2015, la cifra baja de 40.000 y revierte una tendencia alcista. De las 360.192 personas de entre 18 y 24 años censadas en el territorio valenciano, son 39.887 las que no se encuentran matriculadas en ningún tipo de estudios oficiales ni cuentan con contrato de trabajo. Un cambio que los expertos explican, principalmente, en el fomento de los grados de FP, que en Castellón han batido un récord de matriculados durante este curso.
