Las administraciones locales, Diputación y ayuntamientos del triángulo de la cerámica, se reunieron este lunes para buscar vías de apoyo a las industrias que sostienen el empleo y la generación de riqueza en buena parte de los municipios de Castellón. Lo hicieron en un contexto de alarma por el deterioro de la situación por la que atraviesan las industrias vinculadas con el azulejo como consecuencia de la grave crisis de costes, en una jornada en que también se conoció que el número de trabajadores afectados por Expedientes de Regulación de Empleo (ERTE), bien sea a jornada completa o parcial, ha superado los 9.000. Mientras, continúan los despidos y apenas dos factores siguen en clave positiva en una coyuntura con más sombras que luces: la consistencia de una demanda que comienza a dar muestras de fatiga, y las buenas expectativas cara a la feria Cevisama.
La exportación resiste con signos de fatiga
La demanda de cerámica española, en su mayor parte castellonense, sigue consistente, si bien ya da síntomas de fatiga, precisamente debido a la inflación. De hecho, la facturación por la venta de azulejos de Castellón al exterior ha crecido un 29% en los primeros siete meses de 2022 respecto al mismo periodo del 2021, si bien la subida se debe fundamentalmente al incremento de los costes, sobre todo los energéticos, y los metros de baldosas vendidos caen el 2%.
Buen ritmo en la participación en Cevisama
Pese a que, si nada cambia, se celebrará sin contar con un presidente, tras la dimisión de Manuel Rubert la pasada semana, las perspectivas para Cevisama 2023 son positivas a día de hoy. En total, han cerrado ya su participación más de 300 empresas, lo que supone la confirmación cierta del 70% de los expositores habituales del certamen, que tendrá lugar en febrero, la cita más importante tras una edición de Cersaie positiva.
Los precios siguen lastrando la rentabilidad
Son los precios de la energía, pero también los de los suministros y materias primas o el transporte, de manera que la escalada de costes que afecta de lleno no solo a la economía castellonense, sino a la española, europea e internacional, ahoga a las empresas del clúster cerámico, que continúan vendiendo sus productos, pero sufren una drástica caída de la rentabilidad, pese a haber repercutido en parte el alza en sus productos.
El gas, una energía clave con costes que castigan
Uno de los costes que más castigan a las industrias del clúster cerámico, tanto las fabricantes de baldosas, como las dedicadas a la producción de esmaltes específicos para el sector es el del gas, fuente de la que son grandes consumidores. Las medidas tomadas hasta el momento, incluido el tope del gas para abaratar la electricidad, han beneficiado poco a las empresas, ya que, mientras que hace poco más de un año el precio rondaba los 20 euros por megawatio, está en el entorno de los 100 y llegó a su cifra más alta, los 300, en agosto.
Más ERTE y trabajadores afectados
El número de trabajadores afectados por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), no deja de crecer en la cerámica, hasta alcanzar los 9.027 a 13 de noviembre, fruto de 81 procesos abiertos desde que comenzó el año, tal y como informó ayer la Secretaría Autonómica de Empleo. Suponen ya más de la mitad de la masa laboral del sector, de alrededor de 17.000 personas.
La crisis afecta ya a PortCastelló
La crisis en el azulejo afecta ya a los resultados de PortCastelló, tal y como evidencian los resultados de octubre, que muestran una caída de la actividad en las instalaciones de un 19%.
