La UJI desbloquea la elaboración del presupuesto tras las promesas de Generalitat

La comisión de asuntos económicos de la Universitat Jaume I (UJI) reunida este jueves ha emitido un dictamen favorable al proyecto de presupuestos de la UJI para 2023. Con este paso, se retoma la elaboración de las cuentas para el próximo ejercicio, según han informado fuentes de la institución académica. No obstante, matiza, se mantiene un contexto con importantes incertidumbres en forma de ingresos que todavía requieren confirmación.

3 supuestos

La previsión se sustenta en 3 líneas.

1. El compromiso de la Generalitat valenciana de aportar 30 millones de euros adicionales para el conjunto del sistema universitario valenciano, una vez empiece el ejercicio 2023, que permitirán asumir parte de la subida de costes estructurales de funcionamiento. A falta de concretar los conceptos y el reparto entre universidades, a la UJI le corresponderá una cantidad superior a 3 millones de euros. 
2. La UJI también prevé una obtención de recursos adicionales procedentes del plan plurianual de financiación, ahora en proceso de negociación.
3. La UJI incrementará la aportación de remanentes, que alcanzará los 9,2 millones de euros para atender gastos energéticos y de infraestructuras.

Agujero

Hay que recordar que el consejo de gobierno de la UJI decidió el 10 de noviembre suspender el proceso de elaboración del presupuesto para 2023 ante la falta de una financiación justa que garantizase las necesidades reales de funcionamiento de la UJI.

Según informó la UJI en aquella fecha, la diferencia entre los ingresos ordinarios consignados en el anteproyecto de presupuestos autonómicos y el gasto real de la Universidad para 2023 ascendía a 16,3 millones de euros. La UJI planteaba cubrir parte de este déficit con 8,5 millones de remanentes propios de tesorería, pero, aun así, la diferencia de 7,8 millones de euros restantes para equilibrar las cuentas hace inviable realizar un ajuste sin comprometer seriamente la actividad de la Universidad.

No obstante, en las últimas semanas se han producido encuentros entre las universidades y la Conselleria de Universidades para abordar el marco de financiación. Además, el conseller de Hacienda y Modelo Económico, Arcadi España, aseguró el día 22 que el pago de las nóminas del profesorado está garantizado.

Contención

Pese a esta buena noticia, desde la UJI señalan que aunque se confirmen todos los ingresos, la UJI es consciente que el ejercicio de 2023 y posteriores se desarrollarán en un escenario de contención económica por lo que, por responsabilidad como institución pública ante esta situación de dificultad, elaborará un plan de ajuste para priorizar los gastos y asegurar la sostenibilidad financiera de la Universitat.

Un presupuesto de 142,7 millones

El proyecto de presupuesto asciende a 142,7 millones de euros, incluyendo los gastos afectados (aquellos que cuentan con una financiación específica para la realización de proyectos concretos) y los no afectados (los que atienden el funcionamiento ordinario de la Universitat).

Cambio en la contabilidad

Esta cifra no puede compararse directamente con la del presupuesto de 2022, que superó los 125,5 millones de euros, porque se ha cambiado la forma de presupuestar ingresos y gastos en distintos aspectos. Entre otros, se incluye en el presupuesto inicial el coste de la subida salarial aplicable por ley durante el año (en 2022 y en los ejercicios anteriores no se hacía); se han incorporado inversiones y gastos como el sobrecoste de energía eléctrica, que en años anteriores se añadían después mediante modificaciones presupuestarias para incorporar remanentes; y se ha incluido el ingreso anualizado de proyectos plurianuales que, en presupuestos anteriores, se incorporaban también, después de iniciado el ejercicio, a través de modificaciones presupuestarias.

Valoración de la Generalitat

Desde la Conselleria de Universidades han señalado que se han aprobado dos enmiendas para aumentar la dotación presupuestaria de las universidades en casi 31 millones. Por un lado, se ha aumentado la subvención ordinaria, a través del capítulo 1, que pasa de 801 a 824,5, por lo que aumenta un 6% respecto al2022. El resto tiene que ver con los complementos retributivos del personal de la universidades, que pasan de 36 a 43,5 millones. Se trata de una modificación vía enmienda firmada por los tres partidos del Botànic. Según fuentes del departamento de Josefina Bueno, "es un avance para desbloquear la situación financiera de las universidades y podemos confirmar que el pago de las nóminas está garantizado, además del esfuerzo en becas, tasas, convenio colectivo... seguimos trabajando con las universidades, hay plena colaboración con los rectores y equipos económicos", señalan.