Castellón ya recibe más trabajadores de Madrid y Barcelona de los que se marchan

Si las ciudades fueran un imán, Madrid y Barcelona ejercerían la mayor fuerza de atracción para los trabajadores de otras provincias del país. Así ha sido tradicionalmente, aunque en el último año en Castellón se ha dado un vuelco a la situación: por primera vez el intercambio de asalariados resulta positivo para la provincia, hasta el punto de que ya recibe más profesionales tanto de la capital de España como de la ciudad condal de los que emigran.

El último estudio Movilidad del Mercado de Trabajo revela que Castellón, pese al golpe que supuso primero la pandemia y después el alza de costes que asfixia a la cerámica, continúa siendo atractiva para los trabajadores de otras provincias. En 2021 llegaron 3.676 profesionales de otras provincias y se marcharon 3.142. O lo que es lo mismo: el año acabó con un saldo positivo de 534 asalariados.

La novedad, más allá de los datos generales, tiene que ver con los intercambios laborales con Madrid y Barcelona. A pesar del peso de las dos provincias, Castellón ha logrado captar más mano de obra de que ha enviado. Así, y siempre según el informe que elabora la Agencia Tributaria en base a las declaraciones de retenciones que presentan las empresas, durante el último ejercicio llegaron a Castellón procedentes de Madrid 414 trabajadores, mientras que los que se marcharon fueron 334. Y con la capital catalana ocurrió exactamente lo mismo: entraron a trabajar a la provincia 448 personas y las que hicieron las maletas fueron bastantes menos, 387.

Que Castellón logre atraer cada vez a más profesionales de las dos provincias que concentran las principales empresas del país no significa, ni mucho menos, que esas dos zonas sean las grandes emisoras de la mano de obra foránea que llega. De hecho, el grueso de trabajadores por cuenta ajena que entra a Castellón lo hace procedente de las limítrofes Valencia y Tarragona que, a su vez, también son los dos primeros destinos que eligen los asalariados de la provincia a la hora de hacer las maletas por motivos laborales. 

Y un apunte más: los hombres tienen una mayor tendencia a emigrar que las mujeres. Así, ellos suponen cerca del 65% de los trabajadores que se marcharon durante el asado ejercicio, mientras que entre lo que llegaron representan casi siete de cada diez. 

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