Castellón cierra 2022 con una subida récord de sueldos que la inflación anula

Castellón ha cerrado 2022 con cifras récord en una década en lo que se refiere al incremento de los salarios pactados durante sus doce meses, el 2,88%, en una situación en la que la ironía es que el poder adquisitivo cae por la escalada de la inflación hasta el 7,3%, que se come más de la mitad de lo que ha sido ganado en las mesas de negociación entre las patronales y los sindicatos. 

Los datos que acaba de hacer públicos el Ministerio de Trabajo y Economía Social revelan que el promedio de los sueldos acordados en 49 convenios colectivos firmados en el último año es del 2,88% y afecta a un total de 47.310 trabajadores castellonenses.

Son pactos que afectan, en un periodo que ha sido muy intenso por diversas razones, pero también desde el punto de vista de la negociación en el ámbito laboral, a los principales sectores con actividad en la economía provincial.

Se trata del cerámico, que firmó casi al acabar el ejercicio un aumento de los salarios del 4% para más de 15.000 trabajadores con efectos retroactivos al uno de enero, después de un difícil proceso de conversaciones durante las que, casi hasta el final, se dudaba de que pudiera llegarse a un acuerdo como el suscrito en plena crisis de costes energéticos para el conjunto del clúster.

Firma histórica

2022 ha sido un año que arrancó con una firma histórica, la de nuevas reglas del juego para la hostelería, un sector que rompió así una década sin convenio. Lo hizo, además, con un pacto plurianual que recogió una importante subida salarial para tres años, hasta alcanzar un 11% en el periodo comprendido entre el pasado año y 2024. En concreto, para 2022 se fijó una subida del 3%, mientras que en 2023 y 2024 el incremento sería del 4% en cada uno de los ejercicios.

Collidors

Otra actividad marcada por el conflicto, con huelga incluida, es la de los collidors. Finalmente patronal y sindicatos pactaron un aumento de la remuneración durante la campaña 2022-23 del 2% para el salario en destajo (según la fruta recogida) y del 3% en el caso de los jornales (con horario de trabajo establecido). Para las tres campañas siguientes, la subida salarial ha quedado situada en el 2% tanto en la modalidad jornal como en el destajo. Por tanto, la subida hasta 2026 será del 8%.

Limpieza

Conflicto hubo también en el colectivo de las trabajadoras de limpieza de edificios y locales, formado por alrededor de 8.000 empleadas que, después de iniciar movilizaciones y paros en noviembre de 2021, lograron en diciembre pasado ratificar un acuerdo vigente en el periodo comprendido entre el 1 de enero del 2023 y el 31 de diciembre del 2028, que supondrá un incremento salarial global del 30,5%. Este destacado implica como la principal victoria estar en condiciones de cobrar al menos el Salario Mínimo Interprofesional tras años de condiciones por debajo de ese umbral.

Transporte

Otro ejemplo significativo de los acuerdos adoptados en el año del alza promedio del 2,88% es el del sector del transporte castellonense. También con relaciones de conflicto a sus espaldas entre patronal y sindicatos, así como diez años sin renovar las tablas salariales, los aumentos de sueldos se distribuyeron de forma que en 2022 la subida fue del 4%; en el 2023 del 2,5% e idéntico porcentaje en el ejercicio de 2024. 

El desajuste

Son alzas muy significativas, pero todas se quedan muy lejos del entorno del 7,3% que la inflación ha subido el año pasado en Castellón, entre las más altas del país, al quedarse en un promedio que no llega al 3% teniendo en cuenta otros convenios con menor volumen de personal, entre ellos muchos de empresa, que se han firmado muy por debajo de los acuerdos descritos.

En relación con esta situación de desajuste que lleva a perder poder adquisitivo a tantos castellonenses, el secretario general de CCOO en Castellón, Albert Fernández, explicó este jueves que el hecho de que, pese a todo, la de 2022 sea la subida más elevada de la última década tiene que ver también con la última reforma laboral, que marca los convenios sectoriales como la referencia mínima obligada para todas las empresas.

«Ni de lejos se cubre lo que ha subido la inflación, ni la pérdida de poder adquisitivo acumulada desde la crisis de 2008», señaló Fernández, para añadir que «la recuperación de ese poder adquisitivo no va a ser posible, porque nunca lo ha sido en el sistema vigente, por el que, por ejemplo, la Unión Europea no ha optado por un pacto de rentas, sino por subir los tipos y paga el de siempre».

Reivindicaciones

Su homólogo en UGT en la provincia, Francisco Sacacia, puso de manifiesto también la importancia del descuadre entre la evolución de la inflación y la de los sueldos. 

Al mismo tiempo, quiso lanzar un mensaje a los trabajadores al indicar que si los sindicatos, sobre todo UGT y CCOO, que negocian el 90% de los convenios colectivos «piden a los trabajadores que se movilicen será, no solo por el momento concreto, sino por el futuro, porque también en este caso, las cosas no las regalan, sino que hay que pelearlas». 

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