MOVILIDAD COTIDIANA

Solo tres de cada 10 castellonenses ya descartan el coche para ir al trabajo

El vehículo privado sigue siendo la opción central en la provincia para desplazamientos

La normativa europea establece que ciudades como Castelló o Vila-real dispongan este año de zonas de bajas emisiones.

La normativa europea establece que ciudades como Castelló o Vila-real dispongan este año de zonas de bajas emisiones. / ANDREU ESTEBAN

Iván Checa

Iván Checa

La normativa de la Unión Europea contempla la obligación de que las ciudades mayores de 50.000 habitantes, como Castelló y Vila-real, dispongan este año de una zona de bajas emisiones donde se limite la circulación de vehículos privados como fórmula para impulsar la sostenibilidad.

Un paso que supondrá uno de las primeras restricciones al coche y todo apunta a que irán en aumento en próximos años. Sin embargo, los hábitos en la movilidad cotidiana de los castellonenses aún distan mucho de este planteamiento.

La última encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre características esenciales de la población refleja que solo tres de cada diez castellonenses descartan por ahora el uso del coche para desplazarse hasta su lugar de trabajo o estudios. La amplia mayoría del 70% aún opta por el vehículo privado para su movilidad.

Acuden andando

Por orden de importancia, la segunda opción escogida es la de acudir hasta el centro de empleo o académico a pie, como respaldan el 19% de los encuestados. Esto es posible gracias a la proximidad que se da, por ahora, en muchas zonas del territorio provincial con el lugar de residencia habitual al no existir puntos poblados en exceso.

Mientras, el transporte público cae hasta un irrisorio 6%, lo que atestigua el escaso alcance que tiene el sistema tal y como está configurada actualmente la red de autobuses o de trenes. 

Movilidad de los castellonenses

Movilidad de los castellonenses / MEDITERRÁNEO

Precisamente entidades como la Associació Valenciana pel Transport Públic (AVPTP) defienden en sus reivindicaciones que la oferta de esta opción de movilidad alcance más zonas del territorio y lo haga con mayores frecuencias para «cubrir la demanda real y potencial» que tiene.

A fin de cuentas, solo queda un 5% restante de encuestados, que son quienes prefieren utilizar la bicicleta o la moto en sus desplazamientos para atender cuestiones profesionales o académicas.

Por edades

Los datos varían bastante entre los grupos de edad analizados. Los mayores de 16 años y menores de 30 de Castellón son los que más se trasladan en medios públicos como el autobús frente al 2% de las personas por encima de 30 años.

El uso del vehículo privado se incrementa conforme aumenta la edad del encuestado hasta alcanzar el 79% en el caso de las personas de la franja intermedia, comprendida entre los 30 y los 49 años. Poca diferencia existe con los hábitos con aquellos que superan los 50 años, pues el 73% escoge el vehículo privado.