El Gobierno da vía libre a la primera megaplanta solar de Castellón: 258.000 paneles

La macroplanta solar Magda ya tiene el camino despejado. El Ministerio para la Transición Ecológica ha dado luz vez a la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de un proyecto que desde el principio ha contado con un enorme rechazo social e institucional y cuyas cifras impresionan: 95 millones de euros de inversión, 258.622 paneles solares en les Coves de Vinromà y Benlloc, tres subestaciones eléctricas y una línea de muy alta tensión (MAT) de 52,7 kilómetros y que irá desde les Coves a la subestación de la Plana, en el término municipal de Almassora. Esa nueva línea, que atravesará por 11 municipios, implicará levantar 143 torres y a partir de la pedanía de la Barona discurrirá en paralelo a la polémica MAT Morella-La Plana que Red Eléctrica (REE) ha empezado ya a construir. 

Con el espaldarazo definitivo a la megaplanta de 150 megavatios (MW) de potencia, el Gobierno no ha tenido finalmente en cuenta las alegaciones en contra presentadas por la mayoría de los ayuntamientos afectados, como tampoco ha servido la declaración institucional realizada hace un año por la Diputación de Castellón (con el respaldo de todos los grupos políticos) o la petición de Les Corts (a instancias de Compromís) de paralizar el proyecto. Otras iniciativas que tampoco han tenido efecto han sido los informes de las consellerias de Agricultura y Desarrollo Rural y Política Territorial, que en los últimos meses han remitido tres estudios reclamando suspender la tramitación de la megaplanta argumentando que afectaba la avifauna y al paisaje.

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Pese a todas las voces en contra, el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó este martes la DIA favorable del proyecto Magda y su línea de evacuación y daba así luz verde a una de las tres alternativas presentadas por la empresa Tregmul Trade SL (la unión de la francesa Premier Grupo y la china Vakuo), promotora de la primera macroplanta solar autorizada en Castellón. La Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental acepta como válidas las acciones anunciadas por la compañía para «prevenir, compensar y corregir» el impacto que la infraestructura podría tener sobre la fauna, la vegetación, el paisaje o la salud humana en las 472,11 hectáreas (el equivalente a 660 campos de fútbol) que abarca el proyecto. 

Carta al Ministerio

La decisión del departamento que dirige Teresa Ribera no ha gustado nada a la Generalitat, que ya ha pedido al Gobierno que recapacite. La consellera de Agricultura, Isaura Navarro, aseguró que ha enviado una carta al Ministerio indicándole que, sin perjuicio de que el Consell adopte las medidas que considere oportunas en el marco del procedimiento de autorización del proyecto, «debe revisar y corregir la DIA, incorporando los trámites llevados a cabo por la Generalitat tanto que son explícitamente desfavorables a una instalación cuyos efectos negativos, desde el punto de vista medioambiental, quedan fuera de toda duda».

Quien también se ha posicionado en contra ha sido Sílvia Cerdà, directora general Industria, Energía y Minas de la Conselleria de Economía. «Vamos a trasladar al Ministerio el planteamiento inviable del proyecto por razones como la longitud de la línea de evacuación, con importantes pérdidas energéticas; el carácter privado de la línea; el fraccionamiento que la DIA reconoce al hablar de 2 plantas distantes geográficamente; las afecciones territoriales y medioambientales y la ineficacia energética por pérdidas de tensión», aseguró Cerdà. 

Desde Nostra Terra, la asociación que aglutina a buena parte de los vecinos del interior que están en contra de Magda, tacharon la resolución favorable del Gobierno de «escándalo» y « vergüenza». «No se ha tenido en cuenta el clamor de la población que habitamos estas tierras pero, sobre todo, los informes negativos emitidos por el Consell»», explicaron. 

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