Llueve sobre mojado. El temporal que azota la provincia de Castellón ha vuelto a poner en jaque la zona litoral, especialmente, el extremo sur de la provincia que sufre una importante regresión por la falta de obras integrales de regeneración que permitan frenar la virulencia de las olas. De nuevo, la fuerte marejada, por la que se decretó la alerta naranja, volvió a borrar un poco más de una maltrecha línea de costa.
Llamativo fue el caso de Almenara, quien sufrió las embestidas de olas de más de tres metros, aunque los nuevos espigones permitieron salvar la playa de daños irreparables, aunque no fueron suficiente para evitar que el agua inundara algún tramo del paseo marítimo. En este sentido, la alcaldesa de Almenara, Estíbaliz Pérez, manifestó que, gracias a los muros, se han salvado de graves desperfectos, como en pasados temporales cuando las pérdidas eran cuantiosas.
La problemática se centra ahora en el sur de esta localidad, concretamente desde la última escollera y hasta la Gola de Queralt, donde hay más de 1.000 metros sin ningún tipo de defensa. «Es un punto crítico que Costas ya lo tenía en el punto de mira y tienen contemplado una actuación en esa zona, que se llevará a cabo en cuanto pase el temporal. Si no hay contratiempo la próxima semana se realizará el refuerzo», apuntó la primera edila.
Destrozos en el litoral
En otros puntos como Moncofa, Nules, con las casas de primera fila a escasa distancia del mar, y Burriana, el temporal marítimo también ha provocando importantes desperfectos en toda la zona de la playa, eliminando prácticamente la franja de arena.
También son llamativas las imágenes que el fenómeno costero ha dejado en Almassora, donde ha vuelto a invadir la calzada y amenazado algunas propiedades, según denunció la concejala del PP Silvana Rovira. «Sin una política sólida y firme que invierta de forma decidida por la construcción de espigones, estamos literalmente vendidos ante los temporales», lamentó. El oleaje en el tramo de Benafelí especialmente arrastró arenas y gravas a la calzada complicando el paso del tráfico.
Más hacia el norte de la provincia, en Peñíscola, el área de Servicios del Ayuntamiento, en coordinación con la Policía Local, colocó barreras de madera para la contención de arena en varias entradas y acceso a la Playa Norte.
Protesta ciudadana
Por tanto, de nuevo, un temporal ha evidenciado el grave problema que sufre la costa castellonense, como se puso de manifiesto hace tan solo varias semanas en la manifestación que tuvo lugar en Madrid contra la «negación e inacción» de Costas a la hora de abordar esta problemática desde un punto de vista estructural. Los presentes, además de reclamar la ejecución de todos los proyectos de mejora planteados, exigieron un cambio legislativo, con el aval de la Unión Europea, que impida al Ministerio «seguir responsabilizando a la ciudadanía de la erosión, haciendo pasar a los propietarios como culpables», resaltó el portavoz del Som Mediterrània, Manolo López.
Alerta por oleaje
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) informó ayer de que se registraron olas de más de 3,5 metros en el área mediterránea. «De madrugada hubo áreas de mar muy gruesa con altura significativa de olas que superaron los cuatro metros». Para la jornada de este miércoles, la Aemet mantiene activo el aviso amarillo en todo el litoral de la provincia de Castellón por fenómeno costero. Informan Miguel Ángel Sánchez y Alba Boix.
El tiempo se recuperará a partir del viernes
La Agencia Estatal de Meteorología prevé para la jornada de hoy precipitaciones generalizadas en la provincia de Castellón, que serán más frecuentes y abundantes durante la primera mitad del día. Podrán ser en forma de chubascos acompañados de tormenta y localmente fuertes o persistentes. La cota de nieve subirá de 800-900 metros a 1000-1200 metros durante la mañana, con acumulaciones de espesor importantes en el interior.
Las temperaturas mínimas irán en ligero ascenso y el viento del nordeste y este soplará moderado, con intervalos de fuertes rachas en el litoral en la primera mitad del día.
El catedrático de Climatología de la UJI , José Quereda, ha explicado que mañana «todavía habrá inestabilidad» y no será hasta el viernes cuando el cielo esté despejado y las temperaturas tenderán a subir. «Este temporal ha vuelto a interrumpir un periodo cálido, pero no marcará ningún tipo de récord», ha indicado Quereda, quien prevé que, a partir del viernes, las temperaturas máximas vuelvan a oscilar entre los 16 grados y las mínimas se queden en ocho grados en la zona de la Plana. Y es que este anticiclón ha venido para recordar que estamos en invierno, pese a los agradables registros de días atrás.