El turismo confía en que el nuevo Consell mantenga el Bono Viaje

Se puso en marcha a los pocos meses de finalizar el confinamiento y, desde entonces, se ha convertido en uno de los dinamizadores de la actividad vacacional en la Comunitat Valenciana. El Bono Viaje, el sistema creado por la Generalitat para taponar la sangría económica que el covid causó en el turismo, se ha mantenido desde ese instante, pero tiene una fecha de caducidad. Al menos, de momento. Por eso, los empresarios de Castellón piden al nuevo gobierno autonómico que reedite esta iniciativa más allá del 2024.

En este sentido se posiciona el presidente del club de producto turístico Temps, que agrupa a los alojamientos de interior de la Comunitat. Joaquín Deusdad afirma que está «expectante por saber quién se encargará de la política turística del nuevo Consell» y espera, sobre todo, «que se mantengan los avances conseguidos en los últimos años en lo que respecta a los destinos rurales».

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Sobre el Bono Viaje, considera que es «un referente de las políticas de desestacionalización del turismo», con un resultado que califica de «ejemplar», por lo que entre este segmento del negocio vacacional «estamos preocupados por el futuro, ya que se va a mantener hasta finales de diciembre, pero no sabemos lo que pasará a partir de entonces».

Hacer retoques

En los municipios de costa de la provincia también esperan que haya una continuidad. Javier Gallego, vicepresidente de la organización hotelera Hosbec para Castellón, indica que este objetivo «formaba parte de una serie de temas que reivindicamos al Partido Popular durante la campaña electoral». Una idea que considera muy positiva, pero que «podría modificarse en algún término para que se incremente su función de estímulo de la demanda» entre los propios habitantes de la Comunitat Valenciana.

Gallego defiende que las ayudas para disfrutar de escapadas vacacionales «tiene que potenciar su carácter desestacionalizador», de modo que se pueda disfrutar en los momentos de menor actividad turística. «No tiene sentido que la gente pueda disfrutar del Bono Viaje en un puente festivo, que son fechas que de por sí ya registran movimiento en los alojamientos», puntualiza.

Peñíscola y Morella son las localidades de Castellón que más pernoctaciones han registrado de esta campaña de descuentos desde su comienzo. A la espera de conocer cómo será la estrategia turística de los nuevos dirigentes de la Generalitat, el todavía secretario autonómico de Turisme, Francesc Colomer, afirmó meses atrás que el Bono Viaje «ha venido para quedarse muchos años», como uno de los referentes más exitosos de todos los que se han planteado por parte de las comunidades para ayudar al turismo postcovid, «ya que es una herramienta que ha resultado ser muy positiva para mantener activo al sector».

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Solo en el presente año, la administración autonómica ha presupuestado 15 millones de euros para el programa. Desde el 2020, el bono ha tenido un retorno de más de 42,5 millones de euros, entre impacto directo e indirecto. 

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