Las fuertes rachas de viento y el oleaje han provocado que el Puerto de Castelló suspendiera por la mañana su operativa debido a las condiciones climatológicas adversas. Así, esta mañana se han suspendido todas las maniobras de entrada y salida de la base marítima castellonense como medida de prevención. La mala situación marítima ha provocado que gran parte de la flota pesquera no haya salido a faenar.

Es lo que sucede en Burriana y Benicarló, donde en toda la semana no han salido; mientras, en el Grau de Castelló solo ha salidouna barca, mientras que el lunes y el martes no lo hizo ninguna, explicaba el patrón mayor, Manuel Peña, que indica que hay olas de 2 a 3 metros, aunque hoy se prevé una ligera mejoría aún está en malas condiciones. El oleaje ha provocado, además, que hayan llegado muchas cañas y rizomas a las playas, como es el caso de la costa norte de Orpesa.