Uno de cada seis universitarios de Castellón deja la carrera por no llegar a fin de mes

Uno de cada seis estudiantes universitarios de Castellón abandona los estudios por razones económicas. Según se desprende del informe Via Universitaria: acceso, condiciones de aprendizaje, expectativas y retornos de los estudios universitarios (2023-2025), una radiografía del estudiantado superior, de la Xarxa Vives presentado ayer, el 16,4% del alumnado interrumpe su trayectoria académica porque no llega a final de mes. Un documento que alerta de «las desigualdades de acceso y reclama políticas de equidad, género y bienestar para el estudiantado».

Y, pese a las políticas de becas y las ayudas y facilidades que da la Universitat Jaume I (UJI), es el principal motivo para dejar la carrera, seguido de que no le gusta el grado (14%), razones de salud (12%) y la incorporación temprana al mercado laboral (12%), sobre todo entre estudiantes de nivel formativo familiar bajo, origen social humilde o migrantes.

Presión económica

Y es que «la presión económica dificulta en muchos casos la experiencia universitaria», ya que, en la mitad de los casos estudiados, entre ellos en la UJI (49,98%), «es la familia el principal financiador de los estudios, tanto de grado como de máster», con un sistema de becas que cubre el 13,90% de los ingresos, «una parte complementaria», con «un crecimiento importante, de un 22,18%, de alumnos que compaginan estudios y trabajo y un 7,73% que trabajan en vacaciones parar vivir durante el año, «mayor cuanto menor es la classe social del alumno, generando una debilidad en el sistema de ayudas que dificulta el acceso a los estudios superiores», según el informe.

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El informe, con la participación de más de 45.000 estudiantes de 20 universidades y 1.700 titulaciones de Cataluña, la Comunidad Valenciana, las Islas Baleares y Andorra, el informe ofrece una radiografía detallada de la experiencia universitaria actual: desde las condiciones de vida y la organización de los estudios, hasta los hábitos culturales, el bienestar emocional y las expectativas profesionales, concluye que «es necesario priorizar alternativas a la financiación familiar, independientemente de las condiciones socioeconómicas», además de «crear itinerarios curriculares flexibles para aprovechar más los estudios, favorecer el aprendizaje a lo largo de la vida, revisar qué se puede hacer mejor con menos presencialidad y priorizar políticas para romper la brecha de género".

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Las conclusiones:

• El origen social condiciona la carrera: El origen social siguen condicionando el acceso y la elección de los estudios universitarios. El 60% sigue siendo de clase alta. Y tienden a estudiar Ciencias Sociales, Jurídicas y Humanidades. 
• Seis de cada 10 vive aún con sus padres: La vivienda es un problema en la universidad. Y, aunque el 57,1% del alumnado vive en el domicilio familiar, el 26,4% comparte piso alquilado y el 9,1 en piso propio. Son pocos los emancipados. 
• Ellas, a Magisterio;ellos, a ingenierías: La brecha de género se mantiene en la elección de los estudios. Ellas (63% de las universitarias) se centran en Salud, Humanidades y Magisterio; ellos, en ingenierías, economía y tecnología.
• Los estudios ‘on line’ se consolidan: Los estudios on line se consolidan en la vida universitaria tras la pandemia. El alumnado no presencial es más diverso en edad y trayectoria, aunque hay más perfiles de menos de 26 años. 
• Más movilidad: el 10% se va fuera: La movilidad se recupera, con más de un 10% de alumnado en programas de intercambio. Los de Humanidades se mueven más (17%), frente a las ciencias (7,8%) e ingenierías (7,4%).

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• La ansiedad y la depresión, al alza: La ansiedad (23,4%) y la depresión (25,9%) y otros problemas de salud mental (19,1%) van al alza entre el estudiantado universitario, con entre un 11 y un 17% certificado con diagnóstico.
• Brecha de género y desigualdad en el uso del tiempo personal: A pesar de que las mujeres son mayoría en la muestra (63% del alumnado), la elección de estudios continúa marcada por estereotipos de género. Las mujeres se concentran en ámbitos como la salud y la educación, mientras que los hombres predominan en ingenierías y áreas tecnológicas con mejores salidas laborales y lugares de poder. Además, el análisis en términos de brecha de tiempo dibuja una realidad donde las mujeres dedican más tiempo al estudio y a tareas domésticas, mientras que los hombres disponen de más tiempo para aficiones y vida social. Esta desigualdad en la distribución del tiempo se acentuaría con la edad, ampliando la sobrecarga de responsabilidades para las mujeres.
• La consolidación de la educación no presencial: El estudio también constata la consolidación de la universidad no presencial, con un 20% del estudiantado encuestado que sigue los estudios íntegramente en línea. Este modelo, que tradicionalmente acogía a estudiantes de trayectorias no convencionales, registra ahora un aumento notable de jóvenes menores de 26 años. De esta forma, la enseñanza en línea se consolida como una alternativa real y en crecimiento, que incorpora dinámicas propias, y vinculada a perfiles con más responsabilidades laborales y familiares.
• Vinculación y participación en la vida universitaria: Otro de los datos significativos del estudio es la baja participación en la vida universitaria: un 80% del estudiantado asegura no haber participado nunca en ningún órgano ni entidad asociativa. Además, un considerable 22,9% afirma sentirse ignorado por las instituciones. En cambio, la práctica deportiva de los estudiantes es alta (71%), pero tiene lugar mayoritariamente fuera de los campus universitarios.
• Dedicación al estudio y metodologías de innovación docente: El estudiantado muestra preferencia por metodologías activas y participativas, como el trabajo individual y la evaluación continua. Aun así, se detecta una reducción del tiempo dedicado al estudio autónomo, hecho que plantea nuevos retos para la calidad del aprendizaje. No obstante, la asistencia a clase continúa siendo alta (88,5%), desmintiendo el rumor social de que se ha incrementado el absentismo en las aulas.