Arquitectas de Castellón diseñan un mueble 2x1 de urgencia frente a catástrofes

Un mueble dos en uno: cocina más dormitorio. Es la solución que proponen dos arquitectas de Castellón, Francisca (Xisca) Buñola y Zeleste Ortigosa -con despacho en Benicàssim- para hacer frente, como solución rápida y temporal, al problema de habitabilidad que se plantea de inmediato, tras una catástrofe como la dana. Desde el Colegio Territorial de Arquitectos de Castellón (CTAC) han facilitado los diseños y han explicado que el primer prototipo de este mobiliario podrá verse en el marco de la Nit de l'Art, este viernes, 9 de mayo, frente a la sede del CTAC de la calle, en la calle Enseñanza, de 18.00 horas a las 00.00 horas.

Una solución temporal

Una de las diseñadoras y ejecutoras, Ortigosa, relata que la finalidad es "ayudar a aquellas familias que se han quedado sin mobiliario para seguir habitando el espacio inundado hasta que logren restablecerse económicamente y reamueblar su vivienda dignamente". Además, Buñola, también impulsora y realizadora del mobiliario emergente, considera este mueble temporal "con fecha de caducidad, que ofrece un servicio mínimo, necesario para subsistir adecuadamente".

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Regalo para una familia afectada

Ambas han pensado donar este mueble prototipo a una familia afectada por la dana de Valencia. "Está destinado a entregarse y que pueda ser de utilidad para aquellas personas necesitadas», explican. Se da así cobertura a una necesidad inmediata de los servicios básicos, disponiendo de cama, mesa, sofá, cocina y armario de almacenamiento, lo cual dota de independencia personal. Está fabricado con un material resistente y económico a su vez.

Fenómenos adversos

«Aunque, en este caso, esté creado con motivo de favorecer a las familias afectadas por la dana, se trata de un mueble de emergencia que puede adaptarse a cualquier situación de debacle, séase ante un terremoto o un fenómeno meteorológico con fuertes lluvias torrenciales que haya provocado el desplome de la vivienda o ciertos desperfectos y que, por tanto, impida ser apta para residir en ella», apunta Javier Sorlí, coordinador de actividades del CTAC.

En el interior del Colegio, se podrá visualizar además como complemento una exposición informativa que recoge la documentación generada por el Colegio de Arquitectos de Valencia inmediatamente después del calamitoso acontecimiento de la dana, donde se muestran datos de las inspecciones realizadas por los arquitectos, así como un exhaustivo reportaje fotográfico que muestra la magnitud de la tragedia.

Curiosidades aportadas por las arquitectas

El módulo es capaz de resolver las necesidades básicas de un individuo o pareja tras una catástrofe como la sucedida recientemente en Valencia una vez se vuelve a una supuesta normalidad -cuando la vivienda ha quedado limpia de lodo y otros deshechos, se ha verificado su que su estructura y envolvente no ha quedado dañada (o se ha subsanado) y se han restituidos los suministros, al menos, de agua y luz-. Se cuenta con que aparte se disponga al menos un cuarto de baño en uso. "En la mayoría de los casos el agua o lodo perjudicó la totalidad de mobiliario, pero no tubo porqué hacerlo con los sanitarios del baño, por su material cerámico", cuentan. 

¿Cómo surge la idea?

Ambas explican que se les ocurrió "a partir de hacernos las siguientes dos preguntas. La primera y más básica, fue que podamos hacer nosotras con nuestras herramientas, conocimientos, contactos...y surgieron muchas ideas y la segunda, que fue la que nos encaminó en este singular proyecto fue la de intentar ponernos en su lugar, en el lugar de las damnificadas que tras todas las labores humanas más primarias que se estaban llevando a cabo, desde la limpieza hasta todos los compañeros de profesión que han estado ayudando en labores de XXX, e incluso las ayudas económicas, habían un siguiente paso que parecía que carecía de visualización, que era la dignificación del individuo a poder volver a habitar su casa". "Pensamos que algo muy importante tras las ayudas de limpieza y verificación de la estructura era que la gente pudiera volver a su vivienda y desde este punto de partida ir reconstruyendo de nuevo su hogar, pero trasladándose a él lo antes posible", añaden.

Colocación según tipo de vivienda de casco antiguo

Tal y como relatan, se ha diseñado este mueble pensado "para la tradicional vivienda de casco antiguo entre medianeras de 4 metros de ancho de fachada. Las medidas del módulo son las adecuadas para poder colocarla en la estancia de salón de esta tipología de viviendas pudiéndose utilizar también en cualquier vivienda de medidas superiores a éstas, que, con la suma de ambas, son la mayoría de las casas damnificadas".

Uso del prototipo

Las profesionales castellonenses están en contacto "con asociaciones de varios municipios que son las que organizan las ayudas, a ver si aún estuviéramos a tiempo de poder, al menos, con este propósito ayudar a una persona o familia". "La idea es estar preparados si volviera a ocurrir algo similar o con unas características que hicieran que el módulo pudieras ser útil", añaden. "Nos gustaría no tenerlo que utilizar, pero si llegara el momento, lo ideal es que apareciera una cartera altruista que lo apoyara y ayudara. Y siendo éste el caso nosotras estaríamos felizmente complacidas donando tanto el diseño como el conocimiento para poder llevarlo a cabo. 

Además, su montaje se hace en menos de una hora y su coste es muy reducido". 

¿Qué es un mueble de urgencia?

"Es un nombre creemos que es el nombre que mejor lo define. Al final y al cabo es un mueble o conjunto de éstos, y por el otro, no tendría sentido en cualquier otro tipo de situación que nos fuera de emergencia. De hecho, tanto sus proporciones, diseño accesorios y utensilios, y material están preparado para ser utilizarlo de forma temporal hasta que un individuo o familia pueda recuperar su hogar refiriéndonos meramente al contenido completo de éste", contemplan.