Las cabras montesas conquistan también los tejados de Vilafamés

El avistamiento se suma a otros casos recientes en la provincia donde las cabras montesas han irrumpido en carreteras y núcleos urbanos

Vídeo: Las cabras montesas conquistan también los tejados de Vilafamés

Diego de Rando

Néstor Marín

Néstor Marín

Castellón

Parece una escena de una película surrealista, pero ocurrió de verdad. Varias cabras montesas pasearon tranquilamente por los tejados de Vilafamés, como si estuvieran explorando su nuevo terreno con total naturalidad. El vídeo, grabado por vecinos del pueblo, muestra a estos ágiles animales saltando de una azotea a otra, como si aquello fuera un roquedal más de su hábitat.

Lo cierto es que, aunque nos siga sorprendiendo verlas tan cerca —o tan arriba—, no es la primera vez que estos animales se cuelan en nuestra rutina diaria. Su presencia en zonas urbanas de Castellón no para de repetirse, y cada vez con escenas más inusuales.

Un desfile que se repite… en distintos escenarios

Ya en octubre de 2023, en Espadilla, un grupo de cabras fue grabado paseando de noche por las calles. Era de madrugada, y ahí estaban ellas, campando a sus anchas por el casco urbano como si fuera lo más normal del mundo. Solo dos meses más tarde, en diciembre, otro grupo cruzó una carretera comarcal sin prisa ninguna, obligando a más de un conductor a frenar en seco.

Y no acaba ahí. En mayo de este año, se volvió a hablar de ellas tras otro avistamiento, esta vez en el centro de una localidad del interior. El vídeo, que corrió rápidamente por redes y grupos de WhatsApp, dejó claro que las cabras no están de paso: vienen para quedarse (o al menos, a curiosear).

Uno de los episodios más llamativos ocurrió en la Vilavella, en agosto de 2024. Allí, varias cabras jóvenes se acomodaron junto a una pared rocosa, muy cerca del campo de fútbol. A diferencia de otras veces, no se fueron al poco rato: pasaron varios días en la zona, como si hubieran encontrado un rincón cómodo, fresco y con buenas vistas.

También en octubre, ya en pleno otoño, se documentó otro grupo recorriendo una carretera que conecta varios pueblos del interior, como si estuvieran haciendo su propia ruta turística.

Un grupo de cabras salvajes invade una carretera de un pueblo de Castellón

Héctor Gozalbo

De la sierra al tejado

La escena vivida en Vilafamés, por insólita que parezca, forma parte de un patrón que se repite cada vez con más frecuencia. Da igual si es de madrugada, a plena luz del día o entre semana: las cabras montesas han pasado de ser visitantes ocasionales a convertirse en protagonistas inesperadas del paisaje urbano.

Saltan, se asoman, cruzan carreteras, rondan plazas y ahora también suben a los tejados. Lo que está claro es que, si algo caracteriza a estos animales, es que no entienden de límites… ni de carteles de “prohibido el paso”.

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