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El comercio de la naranja, a la caza de clemenules: se cotiza a precio récord

La variedad más emblemática de Castellón tendrá una producción mínima por la reciente granizada en la Plana Baixa

Actividad de un almacén de cítricos de la provincia, en una imagen de archivo.

Actividad de un almacén de cítricos de la provincia, en una imagen de archivo. / Mediterráneo

Bartomeu Roig

Bartomeu Roig

Hace pocos años, la clemenules, el cítrico estrella de la provincia de Castellón, sufrió una grave crisis de precios. La gran oferta provocó que los ingresos de los agricultores no cubrieran los costes de producción. En solo un lustro, el panorama ha cambiado drásticamente: de dejar la fruta en el árbol, ahora hay una fuerte competencia entre empresas comercializadoras para adquirir esta variedad.

Este giro radical se debe a un hecho negativo. Tras varios años de producciones bajas, la próxima campaña citrícola será aún más escasa debido al impacto de la reciente granizada, que afectó gravemente a los municipios de la Plana Baixa, donde se concentra la mayor parte de la producción de clemenules. Carles Peris, secretario general de La Unió, asegura que el interés por garantizar el suministro ha traspasado las fronteras de Castellón. "Hemos tenido conocimiento de agricultores de las comarcas de la Costera y la Canal de Navarrés a los que les han ofrecido vender su producción, y esto es un indicador del movimiento por parte de los comercios para encontrar clemenules de donde sea, para garantizar el suministro a sus clientes", explica.

Precios récord

Aunque la recolección aún no ha comenzado, los primeros acuerdos entre distribuidores y agricultores muestran precios históricos. "Se han cerrado operaciones de 0,60 euros el kilo, y en el resto de acuerdos el precio no baja de los 50 céntimos", detalla Peris. El principal destino de esta fruta será la exportación a mercados europeos, especialmente en el segmento que demanda fruta de buena calidad.

El líder de La Unió advierte que esta mejora en la cotización "no compensará el aforo tan reducido de la nueva campaña, porque creemos que no se podrán recolectar más de 230.000 toneladas, por lo que, de nuevo, será una campaña complicada".

Los productores que hayan logrado evitar el granizo —y si no hay nuevas inclemencias meteorológicas en las próximas semanas— podrán obtener buenos ingresos. Esto se aplica especialmente a quienes tienen terrenos en zonas como Onda o Betxí, "donde hay una buena cantidad de clemenules", comenta Carles Peris. También hay producción en explotaciones del Baix Maestrat y el sur de Tarragona, aunque en menor volumen.

La 'repesca' de la industria

Para los citricultores de Castellón con fruta afectada por el granizo, la oportunidad de obtener ingresos provendrá "del precio de la industria, que dependerá de si el dinero que se les ofrezca es razonable", explica el secretario general de La Unió. A esto se suman otras incertidumbres debido a la escasa producción, como la previsión de menos contratos para recolectores y almacenes al haber menos naranja que procesar. También se temen dificultades en las cooperativas.

Otras variedades

Los precios al alza, debido a la reducción de la oferta, también afectan a otras variedades. Carles Peris menciona que para la oronul se han cerrado tratos de hasta 75 céntimos el kilo, mientras que la arrufatina ha superado los 50 céntimos. En el caso de la marisol, las cotizaciones han alcanzado los 45 céntimos.

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