La patronal española de empresarios CEOE advierte al Gobierno de que el alza del 4% en 2002 del IPC dobla la inflación prevista como media por el Banco Central Europeo, y subraya que el diferencial de inflación entre España y la UE pone en peligro la competitividad del aparato productivo español.

La organización empresarial dijo que el 2002 no ha sido un buen año para los precios, debido a los perniciosos efectos del redondeo de los precios con el euro y a los desequilibrios en los mercados del petróleo, a causa de los distintos conflictos en los países productores.

En cuanto a los salarios, la activación de las clausulas de revisión salarial provocará un incremento adicional del 0,8 en los sueldos, explicó el secretario de Estado de Economía, Luis de Guindos, quien atribuyó esta evolución negativa del IPC al encarecimiento de los productos energéticos.