Junto a los candidatos de cada uno de los partidos políticos, cuya obligación es hacer acto de presencia en cada una de sus citas electorales para pedir el voto, (aunque no todos cumplen con la hipotética misión de hacer campaña), otra pléyade de personajes se suman al carrusel, muchas veces sin saber por qué ni para qué. Otros brillan por su ausencia. Unos por discreción y otros, sin razón alguna. Discreto es Ximo Borrás, delegado territorial del Consell, quien, consciente de su cargo, permanece en su despacho trabajando en sus cosas. Tiene muy clara su responsabilidad al frente de la Casa dels Caragols y no se asoma a la feria de las vanidades que nos invade.

Su homónimo en la plaza María Agustina, Vicente Sánchez Peral, sí está en todos los frentes: con los pescadores, con los agricultores, si viene un ministro, si se va...El subdelegado del Gobierno no es candidato, pero está.

Como también, los parlamentarios nacionales. Con su presencia dan aliento a los candidatos municipales y autonómicos. Se llevan la palma en asistencia a mítines electorales Carmen Pardo y Carlos Daniel Murria, por el PP, y Mario Edo, por el PSOE. No tienen el don de la ubicuidad, pero casi. Menos, Miguel Prim, del PP, quien, por ejemplo, estuvo el pasado lunes en el Mercado y, después, si te he visto no me acuerdo. Juan José Ortiz trabaja desde la cocina de la sede electoral de su partido, donde se cuece la estrategia de los populares para buscar la victoria.

Desaparecido en combate, el último alcalde socialista de Castellón y ex diputado autonómico, Daniel Gozalbo. No participa en ningún acto. Era un clásico en las comparencias electorales del PSPV-PSOE. Deja un hueco que todavía es visible en la escena política castellonense.

También está missing la candidata número 5 a las Cortes Valencianas por el Partido Popular, Ana Michavila, hermana del ministro de Justicia. De origen castellonense, no ha dado señales de vida. Dicen que es una tapada, y tras la presunta victoria electoral de su partido, dejará su escaño en el parlamento autonómico y ocupará altos cargos de responsabilidad en el hipotético gobierno de Camps.

Al otro lado de la trinchera, mis colegas de los gabinetes de prensa. Fabrizio y Eva, en el PSOE, y Carmen, en el PP, no dejan ni a sol a sombra a los cabezas de lista. Son sus ángeles custodios.