En el informe de Ascer se constata que, tras años de crecimiento de la industria de baldosas cerámicas, China es ya el primer productor mundial, con una cuota del 36,4% en 2001, frente al 25,7% que representa la producción comunitaria (España e Italia).

Para la patronal, la industria china "tiene tecnología y los recursos necesarios para fabricar con una relación calidad-precio imbatible, en especial el gres porcelánico pulido", que luego se venden por debajo de los productos europeos.

COPIA DE MODELOS

Otro de los graves problemas que plantean los productores asiáticos viene derivado de las prácticas de reproducción de modelos de baldosas españolas e italianas, por encima de la propiedad industrial que existen sobre dichos productos. De ahí que Olivas haya declarado que "es necesario concienciar a las instituciones europeas y al Gobierno español de la necesidad de articular medidas que impidan la competencia desleal de China hacia nuestros sectores tradicionales".