La invasión mundial de los azulejos chinos empieza a preocupar al sector español, que exige que se arbitren medidas para frenar la entrada de los productos de China. En estos momentos, este país oriental triplica ya la producción de azulejos de España, y se erige como el primer fabricante mundial de baldosas cerámicas, según recoge un estudio elaborado por KPMG Auditores.

Con una producción estimada de 2.100 millones de metros cuadrados en el 2001, frente a los 638 metros cuadrados de España, China ya posee una cuota mundial de mercado del 36 por ciento, mientras que la española se sitúa en el 11 por ciento.

El informe de KPMG Auditores advierte que este nuevo jugador está llamado a desempeñar "un papel importante en el mercado global" y "está planteando ciertos interrogantes que el sector español en su conjunto debe resolver".

A pesar de que, en estos momentos, las exportaciones de azulejos de China representan una décima parte de las españolas, el estudio alerta del vertiginoso crecimiento de las ventas al extranjero de este país oriental. Las exportaciones de baldosas cerámicas chinas pasaron de 14 millones de metros cuadrados en el 2000 a 31 millones en el 2001, es decir, crecieron "un 122 por ciento frente al 8,8 que aumentaron las españolas", especifica el estudio de KPMG.

El informe apunta que "la calidad es la mayor debilidad" de los productos de cerámica elaborados en este país. No obstante, está aumentando su nivel medio por la adquisición de maquinaria extranjera, principalmente italiana, y por la política gubernamental, ya que el Gobierno chino está apostando por la modernización de su economía.

CONCENTRACIÓN

Por otra parte, el estudio de KPMG Auditores explica que, del mismo modo que sucede en la industria española, el sector azulejero chino está muy concentrado geográficamente en el sudeste del país, ya que "el 76 por ciento del producto que se elabora en el país se hace en las provincias de Guangdong, Fujian, Shandong y Zhejiang".