Los médicos de familia de la provincia Castellón encuentran dificultades a la hora de atender a los inmigrantes y comprender sus enfermedades y citan al idioma como una barrera en la curación.

Por ello, en centros de salud como el de Burriana cuentan ya con "mediadores culturales" que actúan de conexión entre el paciente inmigrante y el doctor, comentaron los médicos de familia en un acto celebrado recientemente en Benic ssim.

Además, algunos laboratorios farmacéuticos han editado pósteres con las enfermedades más comunes escritas en ocho idiomas, para facilitar la comunicación en las consultas. "En ocasiones, no sabemos realmente qué les pasa, si es enfermedad u otra cosa, porque vienen algunos que están completamente desarraigados", explicaron.

PROYECTO

En este sentido, el Grupo de Inmigración de Castellón (GICS), de la Unidad Docente del Área 02, ha realizado ya un curso de formación y tiene en marcha un proyecto de investigación para conocer las expectativas de los pacientes inmigrantes y compararlas con las de los médicos "para saber si los inmigrantes reciben la atención que esperan de los doctores", apunta Luis Lizán, el coordinador de la Unidad. Además, este grupo ya está trabajando en la edición de una guía de atención al imigrante.