Los datos del Registro Mercantil a los que ha tenido acceso este diario y diversas fuentes consultadas confirman que fueron seis socios los que pusieron 18.000 euros cada uno para rehabilitar los aparthoteles La Coma que luego fueron vendidos a Jesús Ger. Éstos eran María Amparo Fernández Blanes (esposa de Carlos Fabra), Pedro Casaña Gómez, Manuel Blay Biosca, José Luis Ramírez Salas, Inturmed S. L. e Inmuebles Castellón, S. A. Ramírez se desvinculó de la sociedad al vender sus acciones hace unos años, según explicó él mismo. "No tengo nada que ver con ésto", reiteró al periódico Mediterráneo.