Las pesquisas sobre el 11-M han provocado que los efectivos de la lucha antiterrorista investiguen la relación de algunos procesados por el 11-S con los atentados de Madrid, dada, entre otros, la detención de Jamal Zougan, cuyo nombre ya aparecía en el auto del juez Baltasar Garzón del 17 de septiembre del 2003 para procesar a 35 presuntos miembros de Al Qaeda.

Se trata de unas hipótesis que han desempolvado la supuesta conexión del 11-S con Castellón, donde Garzón dice en su auto que pudo llevarse a cabo una reunión relacionada con los atentados de las torres gemelas de Nueva York. Y en Castellón detuvieron al empresario Sirio Mohamed Khair Alsaqqa, por su presunta implicación en la red de Al Qaeda, siendo uno de los procesados en el auto de garzón, a pesar de que el fiscal no formuló acusación contra él. Está en libertad provisional al frente de sus tres empresas.

Pero la supuesta conexión entre el 11-S y el 11-M se establece desde el momento en que la detención de Jamal Zougan se produjo en el barrio madrileño de Lavapiés. Así, los agentes retoman las investigaciones realizadas en su día sobre algunos procesados por el juez Garzón como presuntos miembros de Al Qaeda, asentados en esa zona de la capital de España y su supuesta implicación en la falsificación de tarjetas telefónicas como las usadas en el 11-M. Surgen nombres como Said Chedadi e Imad Eddin Barakat Yarkas, conocido como Abu Dahdah, a éste último (encarcelado desde el 18 de noviembre del 2001) se le considera el presunto responsable de la célula de Al Qaeda en España.

La investigación de esta conexión puede partir tras las imputaciones a estos dos procesados. Así, en el auto judicial se refleja que Said Chedadi regentaba unas tiendas en la zona de Lavapiés, donde se reunía con Barakat Yarkas y ambos participaron en la venta de tarjetas recargadas ilegalmente.

Chedadi en unión con Abu Dahdah y como otro medio de financiación de sus actividades, se introdujeron en el negocio de venta de tarjetas telefónicas recargadas de forma fraudulenta.

También se investiga la supuesta relación de éste con los que pudieran ser los cerebros del 11-M y el crimen de Casablanca, precisamente, Dahdah declaró recientemente ante Garzón como testigo en la causa abierta para investigar una posible conexión con los atentados del 16 de mayo del 2003 en Casablanca.